(unotv).- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, propuso la pena de muerte en un periodo más corto para los tiradores masivos, afirmó Marc Short, jefe de gabinete del vicepresidente Mike Pence.
De acuerdo con Short el equipo de políticas de Pence ha estado trabajando con el fiscal general, William Barr, en un proyecto de ley de pena de muerte, que probablemente será parte de un paquete de control de armas más grande que la Casa Blanca intentará introducir al Congreso en medio de una ola de masacres.
El fiscal general afirmó en julio que el gobierno federal presionaría para reanudar, después de 16 años, las ejecuciones de asesinos condenados en el corredor de la muerte.
El presidente ha mostrado varios niveles de apoyo para fortalecer las leyes de control de armas desde los tiroteos en masa en Dayton, Ohio, y El Paso, Texas. El del sábado en Odessa y Midland, Texas, volvió a poner el tema sobre la mesa política una vez más.
El domingo, Trump dijo que su administración estaba “comprometida a trabajar con el Congreso para detener la amenaza de ataques masivos”.
“Esto incluye medidas firmes para mantener las armas fuera del alcance de personas peligrosas y trastornadas y reformas sustanciales al sistema de salud mental dañado de la nación. Nuestro objetivo debe ser identificar a las personas gravemente perturbadas e interrumpir sus planes antes de que ataquen “, Donald Trump, presidente de Estados Unidos.
Y agregó:
“Para reducir la violencia, también debemos asegurarnos de que los delincuentes con armas sean encarcelados y se mantengan alejados de las calles. La seguridad pública es nuestra prioridad número uno, siempre queriendo proteger la Segunda Enmienda “.
