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Amlito Moreno no levanta

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Amlito Moreno no levanta.

Sin discurso, sin carisma, sin credibilidad, sin personalidad propia, representando a los intereses de la cúpula (gobernadores, alcaldes, legisladores, Dirigentes Nacionales y estatales), conocido por ser el candidato de Peña Nieto, Alejandro Moreno no levanta en el ánimo de los priístas. Lo ven como el sumiso que va a entregar al PRI a López Obrador.

El candidato a la presidencia del CEN del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, “Amlito” por su cercanía con el Presidente AMLO, no levanta en el ánimo de la militancia tricolor.

A pesar del gasto y del derroche con el que está realizando su campaña a lo largo y ancho de la república, el gobernador con licencia de Campeche, no levanta en las intenciones del voto.

Le está costando mucho trabajo el conectarse con los priístas de base, porque no lo conocen y él a ellos, menos. El mensaje de AMLITO es en esencia “una declaración de amor”, sin amor, sin pasión y sin credibilidad. Se ha rodeado de gente impresentable y perdedora. Es el candidato de Peña Nieto.

Alejandro Moreno no es conocido en territorio, por lo que resulta muy difícil que los priístas lo miren con ánimo.

Cuenta con la ayuda de los gobernadores del PRI, gracias al pacto que tiene Peña Nieto con AMLO, para obtener impunidad por el caso Pemex.

El Propio AMLO ha pedido a los gobernadores del PRI que “apoyen a AMlito”.

Sin embargo, a pesar del apoyo de la cúpula, integrada por los gobernadores, diputados federales y senadores, alcaldes, y dirigentes del partido a nivel nacional y estatales, AMLITO simplemente no entra en las preferencias de la militancia.

Y es que los priístas piden, exigen caras nuevas, sin mañas políticas, sin vicios, sin dobles discursos, sin mentiras, sin acarreos, sin compra de conciencias, sin derroche.

El priísmo aún no olvida la derrota del pasado 1 de julio cuando Peña Nieto, verdadero padrino de AMLITO Moreno, impuso a Pepe Meade como candidato presidencial. Peña Nieto impuso también a Enrique Ochoa Reza, a través del cual, operó la imposición de candidatos y junto con gobernadores, incluido AMLITO Moreno, operó las candidaturas que no cuajaron y ocasionaron la derrota.

En Campeche, Moreno Cárdenas dejó graves pendientes que le son señalados tanto por opositores como por priístas. Campeche está al borde del colapso en medio de tanta simulación y mala administración, advierten legisladores.

Ante la falta de arraigo, los operadores de AMlito Moreno han optado por caer en la desesperación, como es el caso del ex gobernador de Coahuila, Rubén Moreira, a quien Ivonne Ortega denunció por amenazas contra su integridad y contra su hijo Alvaro Humberto.

Ruben Moreira, actual diputado federal, es de los que ha votado a favor de las iniciativas de Morena para favorecer a AMLO. Es esposo de la fórmula de AMLITO Moreno.

Mala estrategia es la de golpear políticamente a una mujer, en este caso a Ivonne Ortega, que va arriba en las preferencias y que lleva un buen tiempo recorriendo el país, ganando simpatías y voluntades, sin necesidad de incurrir en los vicios que la gente rechaza.

Alejandro Moreno representa a la cúpula y sin duda, su proceder apegado a esos vicios, así como a su falta de carisma, ausencia de discurso y poca capacidad para seducir a la militancia, lo sitúan en desventaja.

Vienen dos debates y en ellos, va a ser muy difícil para Moreno Cárdenas mostrarse como demócrata.

En sus últimas apariciones ante escenarios montados, ha tratado de mostrarse duro contra Morena, pero no contra AMLO. En la campaña fue grosero y majadero con Obrador, sin embargo una vez que éste ganó, dobló las manos y adoptó el “flojito y cooperando”.

AMLO se lo comió de un solo bocado.

En Yucatán, la campaña de Alito Moreno es un fracaso, así como también en entidades donde su presencia no logra entusiasmar a los de base.