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Aprobaron presupuesto 2015 del gob federal: más de $4 billones, 702 mil millones

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  • Son 26 mil 713 mdp más al monto total propuesto por el Ejecutivo: Damián Zepeda

  • Se autorizó un endeudamiento neto interno de hasta 595 mil mdp, y uno externo de 6 mil millones de dólares

 

El pasado día 16 de octubre, la Cámara de Diputados aprobó en lo general, con 427 votos a favor, 35 en contra y una abstención, el dictamen que expide la Ley de Ingresos de la Federación para el Ejercicio Fiscal 2015, el cual contempla captar un monto de 4 billones 702 mil 951 millones de pesos. Posteriormente, el día 17, ratificó su desición sin avalar las reservas en lo particular.

De esa cifra, 2 billones 906 mil 192.4 mdp corresponden a los ingresos del Gobierno Federal; un billón 124 mil 163.6 mdp a los de organismos y empresas, y 672 mil 595 mdp a los derivados de financiamientos.

Para 2015, se estima que el Producto Interno Bruto (PIB) registre un crecimiento de 3.7 por ciento; la inflación, de 3 por ciento; el tipo de cambio nominal, en 13.40 pesos por dólar, y el precio de referencia para la mezcla mexicana de crudo de exportación, de 81 dólares por barril.

El nivel de la plataforma de producción de petróleo crudo se establece en 2.4 millones de barriles diarios.

La recaudación federal participable queda en 2 billones 310 mil 415.1 mdp, en beneficio de las entidades federativas y municipios.

El monto de endeudamiento neto interno y externo del Gobierno Federal se plantea hasta por 595 mil mdp y 6 mil millones de dólares, respectivamente. Este último, incluye el monto de endeudamiento que se ejercería para la contratación de créditos con organismos financieros internacionales.

Además, se autoriza un endeudamiento neto interno y externo de hasta 110 mil 500 mdp y 6 mil 500 millones de dólares, respectivamente, a Petróleos Mexicanos (Pemex) y sus empresas productivas subsidiarias.

También se dispensa un monto de endeudamiento neto interno y externo de hasta 8 mil millones de pesos y 700 millones de dólares, respectivamente, a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y sus empresas productivas subsidiarias.

Al fundamentar el dictamen, el presidente de la Comisión de Hacienda y Crédito Público, diputado Damián Zepeda Vidales (PAN), expresó que se incrementó en 26 mil 713 mdp el monto total contemplado en la iniciativa del Ejecutivo federal.

Indicó que hay 20 mil 521 mdp más por ingresos petroleros, a pesar de que el precio de barril pasa de 82 a 81 dólares, debido a que el tipo de cambio pasa de 13 a 13.40 pesos por dólar.

Hay también 18 mil 92 mdp más, resultado del incremento de ingresos tributarios y no tributarios, provenientes de medidas de eficiencia recaudatoria, principalmente del Impuesto Sobre la Renta (ISR) y el incremento en aprovechamientos que son los ingresos que percibe el Estado por funciones de derecho público, abundó.

La suma de ambos conceptos, precisó, da como resultado 38 mil 614 mdp, a lo cual se le deben restar 11 mil 990 mdp por Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS) negativo sobre gasolinas y diésel que resulta del propio ajuste del tipo de cambio, dando esto un resultado neto de incremento de los ingresos totales por 26 mil 713.9. mdp

Zepeda Vidales detalló que se espera recibir un billón de pesos por el ISR; 713 mil 848 mdp por el Impuesto al Valor Agregado (IVA) y 144 mil mdp por IEPS. Los ingresos derivados de financiamientos captarán recursos por 672 mdp, manteniendo la meta del déficit fiscal propuesta por el Ejecutivo, equivalente al uno por ciento del PIB.

Además, los ingresos petroleros alcanzarán un monto de 1.2 billones de pesos, que resultan mayores en 20 mil 521 mdp en comparación con la iniciativa del Ejecutivo; mientras que los no petroleros, serán del orden de 2.8 billones de pesos, aumentando en 18 mil mdp.

Sostuvo que en la Ley no se contabilizará el cálculo del balance presupuestario por el monto del 5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), por gasto de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y para inversión de alto impacto. Esto, sumado al 2 por ciento que se preveía para Petróleos Mexicanos (Pemex), alcanza un monto de 2.5 por ciento del PIB.

El diputado puntualizó que se estableció una obligación para que el Sistema de Administración Tributaria (SAT) fije un esquema ágil para las devoluciones del IVA que soliciten los contribuyentes cumplidos de los sectores de exportación, primario, proyectos de inversión en activo fijo y de producción y distribución de alimentos medicinas que se efectúe en un máximo de 20 días hábiles.

También para que, como medida de apoyo para el cumplimiento de las obligaciones fiscales, quienes tributen en el Régimen de Incorporación Fiscal puedan presentar las declaraciones bimestrales correspondientes al ejercicio fiscal 2014 a más tardar a enero del 2015.

En materia de destino del IEPS aplicable a bebidas saborizadas, se estableció la obligación para que en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) se asigne el equivalente al monto recaudado y se destine a programas de combate a la desnutrición, sobrepeso, obesidad y enfermedades crónico degenerativas, así como para permitir el acceso al agua potable en zonas rurales y proveer bebederos en escuelas públicas.

Damián Zepeda expuso que se adicionó un séptimo transitorio para las cuotas del IEPS a gasolina y diésel que se destinan a las entidades federativas, con el propósito de que se actualicen conforme a la evolución del precio máximo de dichos combustibles, ya que actualmente se determinan como un monto en centavos por litro y no se toma en cuenta la inflación.

Precisó que se incluyó un transitorio para que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, mediante los informes trimestrales, publique lo relacionado con ingresos excedentes, en donde se hará la comparación de los ingresos propios de las entidades paraestatales bajo control presupuestario directo de las empresas productivas del Estado, así como del gobierno federal, incluyendo los ingresos petroleros provenientes de las transferencias del Fondo Mexicano del Petróleo para la Estabilización y el Desarrollo.

En los posicionamientos, el diputado José Luis Márquez Martínez (PRI) destacó que la Ley de Ingresos permitirá el crecimiento económico y la generación de empleo, con un sentido de responsabilidad hacendaria, para hacer frente al complejo escenario económico global, al impacto de la reciente baja en el precio internacional del petróleo y en el volumen de la producción nacional de hidrocarburos.

Señaló que de no haberse aprobado la reforma hacendaria, el entorno internacional nos habría obligado a considerar un drástico recorte en el gasto y la inversión pública, con consecuencias negativas en el crecimiento económico y el empleo, sin mencionar la estabilidad misma de las finanzas públicas. “Hoy tenemos la capacidad de ingreso público suficiente para estimar una tasa de crecimiento de 3.7 por ciento y de reducir la expectativa de inflación a 3 por ciento, además de incrementar en cerca de 7 por ciento el ingreso tributario”, afirmó.

Juan Bueno Torio, diputado del PAN, pidió corregir la Ley de Ingresos y en particular revertir la miscelánea fiscal recaudatoria “porque le ha hecho daño al crecimiento del país, a la generación de empleos y le ha pegado duro al bolsillo de los mexicanos”. Asimismo, planteó hacer una reducción sustancial en la deuda pública y ajustar posteriormente el presupuesto de Egresos.

También señaló: “debemos rectificar los gastos de previsión social en favor de los trabajadores. Evitar el pago de impuesto sobre la renta ante el retiro de los fondos de ahorro de los trabajadores. Quitar el IVA en el transporte foráneo de pasajeros. La depreciación acelerada de inversiones en activos fijos, productivos. El IVA en la frontera, que ha causado una caída del 30 por ciento en la actividad comercial en aquella región”.

Fernando Cuéllar Reyes (PRD) comentó que la Ley de Ingresos no debe convertirse en un cheque en blanco para beneficio del Ejecutivo federal. Debemos asegurarnos, dijo, que los recursos se destinen al desarrollo del país, a mejorar la infraestructura y al gasto social en educación, ciencia, tecnología, salud y seguridad.

Agregó que con las reformas estructurales se dotó al Ejecutivo federal de las herramientas necesarias para mejorar la situación social y económica, pero no ha podido aterrizarlas. Estamos, agregó, en un punto clave donde puede generarse un futuro desastroso como ocurrió con las reformas transformadoras en el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, o bien un futuro optimista, con claros cambios y pasos firmes hacia el desarrollo. “Esto depende del gobierno y su capacidad para materializar los avances que hasta el momento sólo han quedado en letras”.

En tanto, el legislador David Pérez Tejada Padilla (PVEM) indicó que por largo tiempo, la dependencia de los ingresos tributarios petroleros ha sido un reto que enfrenta el gobierno, al cual le resta eficiencia y productividad. Por ello, dijo, la reforma energética fue aprobada a tiempo, ya que la reducción de la plataforma de producción petrolera nos recuerda que es un recurso limitado.

La ley de Ingresos, afirmó, representa un paso más en el camino iniciado hacia la transformación del país. Reconoció que es necesario seguir trabajando para retribuir el papel del sector productivo de la nación. “Lo que se tiene que cambiar no es el tamaño del crecimiento, sino la manera en la que éste se refleja y traduce en mayores beneficios a la población, a través de ingresos eficientes y un gasto justo y equitativo”.

De Movimiento Ciudadano, el diputado Ricardo Monreal Ávila señaló que la Ley de Ingresos para 2015 continúa con una estructura inercial en la que subsisten problemas graves, “los cuales repercutirán gravemente en la estabilidad macroeconómica del país”. Resaltó que el problema fundamental está en la deuda que se plantea, la cual es muy delicada, ya que el “Ejecutivo solicita un monto de endeudamiento interno de hasta 595 mil millones de pesos y uno externo neto del sector público de hasta 6 mil millones de dólares”.

Mencionó que debido a la reforma energética, se presenta una disminución real del 95.4 por ciento en el rubro de derechos como consecuencia de la eliminación de los derechos a los hidrocarburos. Asimismo, la estimación de los ingresos petroleros para 2015 tiene una reducción del 7.1 por ciento, dentro de las cuales los ingresos asociados directamente con Pemex descienden hasta el 8.3 por ciento, “con lo cual se comprueba que la reforma impacta directamente en la capacidad recaudatoria de nuestras finanzas públicas”.

El diputado Adolfo Orive Bellinger (PT) consideró necesario cambiar la visión de pensar que el incremento al ingreso de este año, respecto al anterior, se destina fundamentalmente a gasto corriente, y estimó deben cambiarse las reglas de operación de los programas para que sean gastos de inversión que incrementen la productividad y el crecimiento económico.

Propuso impulsar políticas que, como en la mayoría de las economías desarrolladas y emergentes, permitan salir del estancamiento estabilizador que los mexicanos han padecido en los últimos siete lustros. “Hay que sustituir las políticas y leyes de ingresos y presupuestos inerciales por una nueva visión sea diferente al que rige en la actualidad”.

La diputada María Sanjuana Cerda Franco (Nueva Alianza) señaló que los ingresos para 2015 representan una cifra considerable pero insuficiente para solventar las necesidades de la población, la economía y la sociedad. Enfatizó que además de acelerar el crecimiento económico y la capacidad recaudatoria del Estado, es impostergable mejorar la gestión gubernamental, la transparencia y rendición de cuentas, así como el combate a la corrupción, ya que “de otra manera no habrá ingresos que alcancen para lograr el desarrollo de México”.

Reiteró su postura por intensificar la política de incorporación a la formalidad y sancionar las prácticas de evasión y elusión fiscal, sobre todo en el caso de los grandes contribuyentes, “porque eso desestimula el cumplimiento de las mismas y merma la legitimidad recaudatoria”. Asimismo, destacó la importancia de establecer prioridades en el destino de los ingresos tributarios y manifestó su votó a favor del dictamen.

Al fijar posturas, el diputado Ricardo Mejía Berdeja (Movimiento Ciudadano) consideró que si se aprueba el dictamen, se avalaría un endeudamiento de mil 850 millones de pesos diarios. Lamentó que durante los dos años de gobierno del PRI haya pronósticos equivocados sobre el crecimiento económico.

Su compañero de bancada, Francisco Alfonso Durazo Montaño indicó que votarían en contra del dictamen porque “estos decretos emitidos a manera de parche serán una ocasión más para la opacidad, el compadrazgo y los beneficios fiscales a los grandes grupos económicos”.

La diputada de Movimiento Ciudadano, Zuleyma Huidobro González, indicó que el dictamen es casi igual al del año pasado en materia de impuesto, por lo que lamentó que se apruebe porque el destino será un bajo crecimiento económico como el de este año.

También el diputado Manuel Rafael Huerta Ladrón de Guevara (PT) destacó que hasta agosto de este año, la deuda bruta del sector público en proporción al Producto Interno Bruto (PIB), fue de 39.9 por ciento.

En su oportunidad, el diputado Carol Antonio Altamirano (PRD) dijo que el dictamen es resultado de los trabajos realizados entre las distintas fracciones parlamentarias; sin embargo, advirtió que continuará la denuncia de la transparencia en el gasto para evitar subejercicios; hasta el mes de agosto sumaban 120 mil millones de pesos, sostuvo.

El legislador Francisco Pelayo Covarrubias (PAN) aseguró que el modelo contributivo impuesto es una real contrareforma y lamentó que el gobierno actual haya contratado una deuda del doble a la que contrajo el PAN en el pasado sexenio, por lo que adelanto que a pesar de aprobar el proyecto en lo general, su bancada reservará diversos artículos.

La diputada Angelina Carreño Mijares (PRI) se pronunció a favor del dictamen porque, dijo, con él este país podrá salir avante en el marco mundial, ya que hace más competitiva a las actividades comerciales y garantiza que los ingresos sean destinados a los sectores del país que más lo necesiten.

Por el PRD, el diputado Mario Alejandro Cuevas Mena se congratuló porque el dictamen no planteé generalizar el IVA ni aplicarlo a alimentos y medicinas. Reconoció que la Ley mantiene el sentido progresivo de que “paguen más quienes más ganan”, e indicó que “velará por el interés social”.

Luisa María Alcalde Luján, diputada de Movimiento Ciudadano, expresó que sólo el incremento de la deuda en mil 850 millones de pesos diarios, “debería ser suficiente motivo para que todos votemos en contra”. Cuestionó ¿qué justifica ese aumento cuando los resultados en economía “son mediocres”?

A su vez, el legislador Juan Francisco Cáceres de la Fuente (PAN) hizo un llamado al gobierno a parar el endeudamiento del país, pues para el quinto año de la actual administración federal, dijo, “sería de 250 mil millones de dólares”, y se manifestó en contra del incremento en una sola exhibición de 39 centavos en el precio de gasolinas.

El diputado Adolfo Bonilla Gómez (PRI) destacó que la Ley de Ingresos 2015 es relevante, porque es el primer proyecto que integrará diversas medidas asociadas a la agenda de reformas estructurales aprobadas por el Congreso de la Unión en los últimos dos años, y refleja un nivel de ingresos tributarios fortalecidos y una nueva presentación de los montos petroleros.

Antes de los posicionamientos, se rechazó una moción suspensiva del diputado Manuel Rafael Huerta Ladrón de Guevara (PT), para que el dictamen regresara a la Comisión de Hacienda y construir uno con datos. Expuso que no hay motivación suficiente para determinar la viabilidad económica de la Ley de Ingresos 2015, ya que “no tiene otro propósito que el de encubrir o disfrazar la situación de estancamiento económico del país”.

Para la discusión en lo particular, el vicepresidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Tomás Torres Mercado (PVEM), informó que se hicieron 116 reservas.

Los artículos que contienen estas reservas son: 1, 2, 4, 6, 7, 8, 10, 12, 16, 18, 19, 21, 22, 23, 24, 27, adición de un artículo 22 bis y de un Capítulo Cuarto, así como los transitorios cuarto, quinto, sexto, séptimo y décimo, y la adición de nueve transitorios.