A pesar de que el empoderamiento de la mujer es un tema importante en la vida interna de los partidos políticos, la verdad es que en Acción Nacional, està pasando algo extraño: las mujeres estàn renunciando a sus candidaturas.
Las panistas yucatecas no quieren “empoderarse” o bien, no desean ser parte de la gran simulación que existe. Simulaciòn que se ejecutó el pasado 22 de febrero del presente año, durante la jornada electoral interna.
Patricia Gamboa Wong da la pauta: no está de acuerdo con la forma en la que la cùpula panista en Yucatàn, arropò a la hija del cacique de Tinum, Natalia Mis Mex, y la condujo hasta la tercera posiciòn en la lista de los candidatos a diputados plurinominales. Su inconformidad es el grito de guerra contra las severas corruptelas que desde la cùpula del PAN se ejecutan para preservarse en el poder.
En Septiembre de 2012, Patricia Gamboa compitió por el Comité Directivo Municipal del PAN en Mérida. En aquel entonces prometiò volver al PAN a sus orìgenes. Es decir, restaurar los principios establecidos en la doctrina partidaria. Sin embargo, la cùpula cerrò filas con Gerardo Bolio de Ocampo, quien llegò fortalecido por el apoyo del entonces poderoso e influyente alcalde de Mèrida, Renàn Barrerra Concha.
Hoy se atreve Patricia Gamboa a hacer pùblico su rechazo a la corrupciòn que invade al PAN en Yucatàn. Aunque no se atreviò en aquel entonces mes de septiembre del 2012. Se ve que està “hasta la madre”… dicen que dice.
Renunciò pues a su candidatura, se las aventò en la cara y ademàs revelò en el Diario de los amores panistas, su verdad, que en realidad es la verdad de todos, aunque los privilegiados y muchos cautelosos callan la suya.
Al igual que Gamboa Wong, Elisa Ibarra Noh renunciò a su pre candidatura por el III distrito. Las razones fueron las mismas.
Hoy se sabe que Mercedes Estrada Mèrida ha soltado ya su candidatura al VI distrito electoral.
La prestigiada Sofía Castro Romero, coordinadora de la fracciòn de diputados pniastas en el Congreso, de plano prefirió salvar su honor y renunció a buscar una candidatura. “Los dados estàn cargados” advirtiò. También dijo que en el PAN, no hay democracia. Actualmente atiende su demanda en contra del CEN y del CDE del PAN en la entidad por incumplimiento de equidad en los cargos de consejeros panistas, ante el Trife.
Así las cosas, las mujeres abandonan al PAN por no respetarlas.
Sofía, Patricia, Elisa, Mercedes, se suman a otras mujeres (Ana Rosa Payán, Silvia Lòpez Escoffié, etc) que han abandonado al PAN con gran decepción, pues sin decirlo expresamente, reconocen públicamente que la corrupción, y la perversión han invadido al partido blanquiazul hasta la médula.
Los beneficiados (as) callan. Otros que ya no lo son, también gritan y denuncian, como el Caso de Mary Yoly Valencia, que está muy molesta e “indignada” por la forma en la que le ganaron la candidatura por el IV distrito federal. En fin.
