Inicio Análisis político Alejandro López Munguía Candidata al Senado por PRI de Yucatán, saldría de entre cuatro mujeres.

Candidata al Senado por PRI de Yucatán, saldría de entre cuatro mujeres.

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Para la elección 2018, la candidatura al Senado de la República será por fórmula, un hombre y una mujer. En este sentido todos los partidos deberán postular a su propia fórmula para el Senado. En el caso particular del PRI, una de esas posiciones le corresponde a una mujer.

Esa posición se la disputan varias mujeres prístas, y según el pronóstico, la candidata saldría de entre cuatro mujeres: Celia Rivas, Dulce María Sauri, Zacil Moguel y Lucely Alpizar.

Las cuatro mujeres tienen una trayectoria y ninguna está descalificada de facto.

En los círculos políticos se habla de la intensa actividad que está teniendo Zacil Manzur, Diputada Federal suplente de Ivonne Ortega, quien ha destacado en la Cámara por su sólida defensa de los derechos de la ciudadanía. Grata impresión ha causado por su destacado desempeño.

De igual forma, una sólida candidata al Senado es Celia Rivas Rodríguez que se ha ganado a pulso su nominación. Mujer de retos que ha sorprendido al propio Gobernador Zapata Bello con su eficiente desempeño al frente del Congreso del Estado, así como con su arraigo ciudadano y su liderazgo efectivo en el cada día más amplio grupo de mujeres denominado Las Luciernagas.

A últimas fechas la Diputada Federal, Lucely Alpizar sufrió un terrible tropiezo político al caer en desgracia el proyecto de la Escuela Estatal de Mujeres, que fue ampliamente criticado por diversas egresadas, todas ellas, lideresas del partido que se dijeron defraudadas por la legisladora. Este tropiezo ha dañado su imagen diplomática.

Y ya encarrerados levanta la mano la ex gobernadora interina, Dulce María Sauri Riancho, que de pronto empezó a aparecer en los eventos del tricolor. Dulce María vivió momentos de gloria durante el periodo en el que ocupó – por dedazo – la silla de gobierno allá en los inicios de los años 90’s. En 1993 abandonó el encargo de forma inesperada, luego fue Secretaria General del PRI y terminó siendo Presidenta Nacional del mismo, cargando con la derrota presidencial a cuestas, aunque se aseguró un escaño en el Senado. Ya como Senadora intentó infructuosamente ser candidata a la gubernatura en el 2007, y posteriormente intentò de nuevo ser diputada federal. Hoy lo vuelve a intentar, apostando a su cercanía con el gobernador Zapata Bello y a viejas amistades del círculo priísta nacional. Tiene derecho a aspirar las veces que se le antoje, sin duda.

Así las cosas, la disputa por la candidatura al Senado es otra batalla en la que el PRI deberá salir bien librado.

Una mala decisión y muchas cosas se vendrán abajo.

Cuatro mujeres que son realmente valiosas, sin embargo, cada una de ellas peleará con uñas y dientes su derecho a ser elegidas.

Aquí sí que será una decisión del Jefe Político de ese partido, Rolando Zapata Bello, aunque él le pase la bolita a la dirigencia estatal.