Carta Abierta al Alcalde de Mérida: quédese y honre su palabra

Querido amigo, Renán Barrera Concha:

La presente, es para recordarte amigo mío, que en la vida, hay que honrar la palabra. Sí, porque es lo único que te da valor.

Por eso, quiero pedirte a nombre de los meridanos, que no abandones el cargo de presidente municipal de Mérida. No lo hagas. Prometiste en campaña, no ser como los demás, que usan el cargo como trampolín político. Sabemos que estás buscando la candidatura a diputado federal plurinominal por tu partido: Acción Nacional. Y no es que no tengas derecho, lo que pasa es que si lo haces, no tendrías vergüenza.
Quiero recordarte los compromisos que hiciste y que hasta la presente fecha, no has cumplido:
1.- Prometiste que restablecerías los servicios públicos en la Ciudad al 100%. Renán sabes muy bien que la Ciudad tiene un millón de baches, 7 de cada 10 parques públicos están descuidados y enajenados por personas que los usan para su interés particular, los mercados públicos literalmente cayéndose, y más.
2.- Prometiste que iluminarías Mérida. Y no solo no hay luz en decenas de Colonias, Fraccionamientos, Avenidas, Rumbos, Barrios, sino que te enredaste en un pleito con el banco Santander y ahora, por orden judicial nos obligas – a los meridanos -, a pagar más de 400 millones de pesos de multa.
3.- Prometiste que nunca caerías en Corrupción. Y nos mentiste. El caso de la Ventanilla Única, cuyo predio es del subdirecto de salud pública de la Comuna y en donde has gastado más de un millón de pesos en renta y adecuaciones. Eso fue un pago de favor político. Pero también están los casos de las empresas fantasmas a los que tu administración les facturó para desviar recursos del Carnaval 2014. ¡Y cómo olvidar los viajes de tu esposa a España e Italia con dinero del pueblo!. Eso fue: turismo político. Y así muchos casos más, de hecho, tienes más de 20 denuncias ante la contraloría municipal y una solicitud de juicio político por la designación de 50 mil predios a la empresa Setasa, de forma discrecional y al amparo del poder.
4.- Prometiste no endeudar a Mérida y la endeudaste, condenándonos a los meridanos a pagar 150 millones de pesos durante 15 años.
5.- Prometiste ser transparente y rendir cuentas del recurso público, pero también mentiste. De hecho, el IMCO te reprobó recientemente por esconder tus cuentas.
6.- Prometiste amplia inversión pública que impulse el desarrollo y la modernización de Mérida y sus comisarías, pero solo destinas el 14%, mientras que en Gasto Burocrático te sirves con el 70% del presupuesto 2015.
7.- Prometiste no usar los recursos del pueblo para favorecer a tu partido, el PAN. Pero nuevamente mentiste, pues usaste durante el 2013 y el 2014, el presupuesto público destinado del Ramo 33, para hacer obra pública en comisarías donde tienes intereses partidarias. Haciendo incluso, obras carreteras para hacer lucir grandes mansiones privadas. De hecho, más de 50 comisarios y sub comisarios te han hecho manifestaciones para reclamar tu falta de atención, así como la marginación con la que desgobiernas a los habitantes de dichas comunidades.

8.- Prometiste cumplir con la ley, actuar siempre apegado a derecho y ajustarte a la aplicación de la misma, sin embargo, la Contraloría Municipal te ha encubierto. Teniendo todos los elementos para resolver las denuncias en contra de tu administración, se ha reservado las resoluciones. ¿Con qué objeto?. Eso se llama impunidad.

9.- Prometiste que “rellenarías el hueco” – así calificaste el paso a desnivel -, porque según tú, recordaba la golpiza que recibieron el pasado 4 de julio del 2011 algunos ciudadanos y políticos panistas. Y no cumpliste. Al contrario, le invertiste en mantenimiento porque te diste cuenta de la utilidad de dicha obra.

10.- Prometiste encabezar una administración municipal que propiciara el diálogo y el consenso. Pero una vez más mentiste: engañaste por ejemplo al poder legislativo al prometerle a los diputados que de aprobar tu solicitud para endeudar a la Ciudad con 150 millones de pesos para obra pública – que por cierto no has invertido -, los invitarías a formar parte del Consejo Ciudadano para vigilar la correcta y oportuna aplicación del mismo. También no has dejado de confrontarte con el empresariado yucateco, al que le prometiste que acabarías con el ambulantaje en el Centro Histórico de Mérida. Incluso los empresarios organizados te han acusado de promover el ambulantaje.
En fin, como verás, no tienes otra más que cumplir con tus compromisos con la ciudadanía, que creyó en tus promesas y te llevó hasta la presidencia municipal con su voto libre y razonado.
Ésta petición amigo mío, no responde a un interés personal, sino a un tema de orden público. Pocos tienen el privilegio de ser alcaldes de su Ciudad, no desprecies a los meridanos. Ten ética y honra tu palabra: arregla todo el desorden que has originado con tu inmadurez, y sé congruente. No seas soberbio. No renuncies, y sigue en el cargo, si no lo haces por consciencia, hazlo al menos por vergüenza, porque como te señalé al principio, lo más valioso que tiene un hombre es su palabra. Cúmplela pues, por favor amigo.

Atentamente
Alejandro López Munguía