México suma más de 100 mil fallecidos y ya rebasó el millón de contagiados
El Presidente de la República renunció a ser el ejemplo de los mexicanos para la aplicación de medidas preventivas y desincentivó herramientas que pudieron acotar cadenas de contagio.
Inmerso en arrogancia, Hugo López-Gatell, ignoró las recomendaciones internacionales y la opinión de expertos nacionales que buscan fortalecer la estrategia que no ha contenido la curva de contagio.
Si 60 mil fallecidos por COVID-19 era un escenario catastrófico para los epidemiólogos que lideran la estrategia, los 100 mil exhiben un rotundo y criminal fracaso de las autoridades sanitarias.
México suma más de 100 mil muertos y ya rebasó el millón de personas contagiadas por COVID-19, además, se coloca en el cuarto lugar a nivel mundial con más fallecidos y en el primer lugar por muertes entre el personal de salud que está en la primera línea de batalla ante la pandemia.
Seguir privilegiando la estrategia de camas vacías por encima de la atención oportuna, e insistir en el menosprecio de medidas de prevención tan simples como el uso del cubrebocas, seguirán llevando a miles de mexicanos a perder su salud y su vida, en un número que ya es imposible imaginar, pero que refleja lo equivocado de la estrategia del Gobierno Federal y la negligencia de las autoridades sanitarias y su incapacidad de reconocer sus errores.
A lo largo de ocho meses, desde que se registró el primer mexicano muerto por COVID-19 hasta hoy, el Gobierno Federal rechazó la política de pruebas masivas que ha servido a otros países para identificar y cortar cadenas de contagio; renunció a realizar confinamientos focalizados y a entregar un ingreso mínimo vital a las personas que perdieron su empleo. También ignoró la recomendación de crear una base de datos nacional para dar seguimiento a los casos de contagio y fallecimiento, así como a incentivar una disciplina social con medidas determinantes como la cultura de distanciamiento.
Los resultados son funestos: las autoridades mexicanas reportan 100 mil 104 fallecidos y más de un millón de contagiados. En el umbral de los cien mil mexicanos muertos, la narrativa del Presidente de la República está intacta, insiste en negar la gravedad de la crisis sanitaria y asegura que México va de salida, sin embargo, lo que está provocando su discurso es normalizar el número de muertes e incentivar en la comunidad el relajamiento de las medidas preventivas.
Desde Movimiento Ciudadano exigimos al Gobierno Federal que escuche y abra las puertas a los expertos que son sus aliados, nunca enemigos, en la lucha contra el coronavirus. Corregir la estrategia nacional no significa una derrota, al contrario, salvará la salud y la vida de más mexicanos. Si el orgullo no le gana al Presidente de la República, podría aprovechar la audiencia nacional que tienen sus conferencias matutinas y promover medidas de prevención básicas y efectivas como el uso del cubrebocas.
La mayor de la crisis sanitaria que han enfrentado los mexicanos en los últimos cien años, enmarca una serie de irresponsabilidades de las autoridades federales, desde el Presidente Andrés Manuel López Obrador, quien en las conferencias ha desalentado el uso del cubrebocas y estimulado los abrazos en plena aceleración de contagios; hasta el doctor López-Gatell, quien ha sido negligente al negar la utilidad de las pruebas diagnósticas, pese a las recomendaciones de la OMS.
El 20 de junio pasado, Movimiento Ciudadano presentó una denuncia ciudadana ante la Secretaría de la Función Pública por las posibles omisiones, negligencias y mal desempeño de funciones del Subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, durante la pandemia. Han pasado 74 días y todavía no concluye la investigación.
Además, junto con organizaciones civiles, propusimos reconocer como derecho de los mexicanos el Ingreso Vital de emergencia, un apoyo económico que se entregaría a las personas más afectadas en situaciones especiales como la crisis económica derivada de la pandemia, sin embargo, el Presidente la descartó etiquetando la propuesta como “politiquería”.
En Movimiento Ciudadano sostenemos que la indignante muerte de más de 100 mil mexicanos exhibe un rotundo y criminal fracaso de las autoridades sanitarias de México, además de una Administración que no escucha, no atiende y que trata de normalizar una de las peores crisis sanitarias. El Gobierno de México debe reconocer que su estrategia falló y dar un golpe de timón, sino nuestro país podría duplicar el número de muertes que ellos mismos consideraron como escenario catastrófico.
Movimiento Ciudadano
Boletín de prensa
