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Curiosidades de la Asamblea Municipal del PRI en Mérida.

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Rolando Zapata Bello y Carlos Sobrino Argaez

Curiosidades de la pasada Asamblea Municipal del PRI.

En la Asamblea Municipal del PRI celebrada el pasado día jueves, sucedieron cosas asombrosas. Entre las principales están el juramento de lealtad al Jefe Político del estado, que hicieron el Diputado Federal, Pablo Gamboa Miner, y la Senadora Angélica Araujo Lara, así como el fuerte y prolongado aplauso que se llevó Víctor Caballero Durán, actual Secretario de la SEGEY. Dato especial fue la ausencia de Jorge Carlos Ramírez Marín, que envió a su representante para que no digan que no le interesó la cita.

El boletín oficial girado posteriormente a los medios presumió la unidad del tricolor. Una unidad forzada, dicen unos, pero unidad al fin, dicen otros.

Un dato curioso que generó inconformidad, fue el hecho de que a pesar de estar presentes, ningún diputado estatal tomó el uso de la palabra, o mejor dicho, no se la dieron. Y eso que son los representantes naturales del pueblo y por ende de la militancia.

Al evento asistieron muchos priístas, pero curiosamente no todos se llevan entre sí. Estuvieron los ejércitos de Caballero Durán, los de Mauricio Sahui, los de Pablo Gamboa y … nada más; los demás aspirantes no tienen militantes en sus estructuras.

El siempre amable y sonriente Francisco Torres Rivas se dejó querer por cuanto militante lo abrazó y saludo. Él sí hizo uso de la palabra. Obvio que se lleva muy bien con el Gobernador Zapata Bello.

El remate de Carlos Sobrino Argaez fue digno de una reunión que por su naturaleza no lo merecía. “La puerta está abierta para los que no estén de acuerdo con el partido” afirmó, palabras más, menos. La rudeza del dirigente estatal tricolor, contrastó con el ánimo de la militancia, que desea ser escuchada, no regañada y menos amenazada.

El PRI mostró un poco de su verdadero rostro. Intereses ocultos se apoderaron de la Asamblea, las manos que mecen la cuna movieron las fichas y la mente de los tricolores se estremeció con un juramento que suena a sentencia. Los que hablaron condujeron a los demás a ligar su destino al destino de las decisiones del Jefe Político.

La democracia en el PRI es singular, no es la que todos conocemos abiertamente como la que permite y lo regula todo. En el PRI se permite plantear, pero no se otorgan concesiones. ¿Cómo se porta menganito?, ¿qué dijo sutanito?, ¿se cuadró perenganito?, preguntas que al responderlas marcan el destino de los que no cuentan con la bendición del Jefe Político y de sus generales.

Así son las cosas en el PRI, y más ahora que necesitan ponerse las pilas para sacar al candidato a Gobernador y aprovechar que a finales de noviembre arrancan las pre campañas. El candidato del PRI tendrá que salir en la primera quincena de noviembre.

El PRI está vivo sin duda, pero, no está unido aún. Le falta consenso, carece de sustento, el peligro es desgastarse y morir en el intento. A ver qué pasa.

 

Por cierto… ahora se sabe que los Ivonnistas, Ulises Carrillo y Gaby López son puntales en la estrategia electoral del PRI, el primero tendrá la responsabilidad de la realización del Plan Político y la segunda, es la estratega de marketing electoral. Los dos cuentan con el respaldo de Rolando Zapata Bello.