Crónica de un polémico racista.
México se enfrenta con un cabeza dura que no otorga consensos y de esa forma imposible dialogar con un testarudo.
Amenazas tras amenazas, ahora enfrentamos el alza de los aranceles, México se aprovecha de los Estados Unidos, afirma Trump, y no coopera con el problema migratorio. Y como castigo quiere imponer a las exportaciones mexicanas un 5% y si no hace nada al respecto (según él) hasta el 25%, sin pensar en sus ciudadanos Trump pretende castigar a México.
Bueno en éste asunto ambos pierden, México un poco más porque desestabilizaria la moneda mexicana.
Pero todo lo que se exportamos es de primera necesidad para el pueblo Estadounidense, como lo primordial, como un pequeño ejemplo: tomates, aguacates que los ciudadanos estadounidenses consumen mucho, toda la fruta, legumbres, Cerveza, tequila y su costo subiría para ellos, más todo lo que se ensambla en México y es enviado al país vecino.
Mucho se ha hablado de que México debe entablar, buscar nuevas rutas de comercio para no depender de los Estados Unidos, porque seguir insistiendo con un país, que cuando les conviene somos los culpables de todo, y más, que en estos momentos está gobernado por un testarudo.
Pero fuera de éste show mediático de Trump contra México sabemos somos el chivo expiatorio para sus interés de campaña, se acercan las elecciones en Estados Unidos y acrecentara los ataques a partir de éste mes de junio.
Con referencia a que México tiene la culpa de la ola de migrantes Centroamericanos, ya lo hemos vivido antes en América latina y en México, la CIA crea problemas para sacar provecho. Eso de que miles y miles de Centroamericanos sean ” animados” para movilizarse de la noche a la mañana a la frontera norte de México no es nada descabellado que sea una estrategia del Gobierno Estadounidense para que Trump tenga argumentos (racistas), ” firmes ” para una campaña electoral antimigrante.
Recordemos que el propio gobierno estadounidense orquestó Rápido y furioso, ellos fueron los que proporcionaron armas al crimen organizado.
Siempre se ha dicho que la miseria en centro América, parte de la culpa es de Estados Unidos y jamás han querido ayudar al desarrollo de esos países.
México ha propuesto mirar con sensibilidad a centroamérica, promover su desarrollo, su autosuficiencia y con ello empleo.
El muro es el dolor de cabeza de Trump, no quiere quedar mal con su promesa de campaña de levantar el muro y de expulsar a los migrantes lo más que pueda, y como quiera busca como aludir a México diciendo que el tiene que pagar el costo del levantamiento del muro.
México está siendo utilizado por Trump para mantener el enojo y hacer creer que está en lo correcto y lograr obtener un periodo más.
La estrategia de Trump podría salir contraproducente si pone en marcha el alza de los aranceles, porque quien pagaría las consecuencias son los ciudadanos y sus empresas.
La astucia de Trump para vender a sus ciudadanos que es emergencia nacional castigar a México con subirle los aranceles, y seguir promoviendo el racismo, no sólo es de locos sino descabellado.
Pero en realidad piensa utilizar el dinero de los aranceles para su gran sueño, levantar el muro sostificado como el muro de Berlín.
Los ciudadanos norteamericanos no están de acuerdo con Trump, ni siquiera la bancada de su propio partido, que junto con los demócratas pararan tan descabellada idea.
De nuevo Trump en aprietos.
