Lo hizo “sonriendo”, con especial juego de palabras, Emilio Gamboa se atrevió a hacer el papel de verdugo, como en los viejos tiempos, emulando a Don Fidel Velázquez, a quien conoció y consintió por orden presidencial, siempre y en todo momento.
El Senador yucateco se puso las “pilas” y ejecutó la embestida contra los que no avala, para cerrar la contienda entre cuatro. Recurrió al lenguaje cifrado, pero velado.
En rueda de prensa en el Senado, y en amena plática con los reporteros, le entró al asunto de avalar a los que él considera los presidenciales rumbo al 2018 y “socarronamente” retó a la comunidad reporteril “¡a ver ustedes díganme y yo les respondo, para que luego no vayan a decir que yo dije”, y la batería se le fue encima. Se “puso guapo” con Meade, de quien dijo “sí está”; también lo hizo con Narro, con Osorio Chong y con Nuño; sobre De la Madrid dijo “está haciendo su esfuerzo”, lo mismo dijo de Eruviel, pero con Manlio Fabio se frenó, “anoche cené con él y no le pregunté, pero si me das chance le pregunto”. Ya encarrilado dijo “¿no ha levantado la mano ninguna mujer” y los reporteros le señalaron “Ivonne Ortega”, a lo que Gamboa dijo “fue a la Asamblea perdió por mayoría lo que propuso, está haciendo su esfuerzo, pero no tiene la fuerza del partido en este momento”.
Las reacciones no se hicieron esperar, Ivonne Ortega Pacheco le respondió a través de sus redes sociales ” Yo desacredito a Gamboa como autoridad moral para seleccionar a cualquier candidato del PRI. Esos tiempos ya pasaron, el que quiera competir tendrá que convencer primero a la militancia, por eso la importancia de quitarle a los pluris los cargos por herencia”.
Emilio Gamboa intenta meterse de lleno en el proceso de selección del candidato presidencial, lo ha hecho siempre y ahora es evidente que desea facilitarle la decisión al partido, o tal vez al grupo más fuerte en la presidencia.
En el pasado, Emilio Gamboa ya tuvo desencuentros con la ex Gobernadora Yucateca. No es santa de su devoción. Sin embargo, Ivonne a apoyado a su hijo, el actual diputado federal Pablo Gamboa, quien busca la gubernatura del estado en el 2018, a pesar de la oposición y el mal trato de un sector del gobierno estatal.
Así se ponen las cosas en el PRI nacional, Ivonne Ortega le salió respondona a Emilio Gamboa, que claramente quiere quedar bien con el grupo más influyente de la presidencia de la república y que controla el partido. Aunque la verdad sea dicha, Emilio Gamboa resintió que se acabara el “chapulinazo” a propuesta, de Ivonne Ortega y de otros priístas en la pasada Asamblea Nacional.
Ivonne Ortega ha dicho “que gane la candidatura el que la militancia quiera”. Insiste con vigor que lo importante es competir, pues de esa forma se cala el verdadero liderazgo. Emilio Gamboa no se distingue por esa cualidad, nunca ha competido por un cargo, siempre ha brincado de un cargo a otro. Es un hombre, dicen, esencial en el poder. Ayer amaba al Presidente de la república Miguel de la Madrid Hurtado y hoy descalifica a su hijo sin mínimo problema.
A mi mente llega un hecho histórico local, cuando en el año 2001, la legisladora Mirna Hoyos, le dijo al entonces aspirante a gobernador de Yucatán, Orlando Paredes Lara, “contigo no ganamos”, y con él, el PRI entregó la gubernatura del estado aplastantemente. Siento que lo mismo se puede dar, si insisten en imponer a un candidato no priísta, no identificado con la ciudadanía y con el respaldo de la militancia tricolor. Pero bueno, solo menciono el hecho para ilustrar el punto.
Como siempre, comparto con gusto, mi punto de vista.
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