En otras noticias, los líderes humanitarios de las Naciones Unidas destacaron la necesidad urgente de mantener el apoyo para los refugiados rohinyá en Bangladesh.
Al final de una visita conjunta al país,el jefe humanitario Mark Lowcock, el Alto Comisionado para los Refugiados, Filippo Grandi, y el director general de la Organización Internacional para las Migraciones, António Vitorino, reiteraron su compromiso para encontrar soluciones seguras y sostenibles para los refugiados rohinyás en Myanmar y encontrar condiciones propicias para su retorno.
Los altos funcionarios pidieron a la comunidad internacional que continúe apoyando a los más de 1,2 millones de personas en Cox Bazar que necesitan ayuda críticamente.
"Esta sigue siendo una de las crisis de refugiados más grandes del mundo. Hay más de 900.000 refugiados rohinyá en Bangladesh, la mayoría de los cuales huyeron de Myanmar en 2017. Vi un gran progreso, pero su situación, especialmente para mujeres y niños, sigue siendo frágil”, aseguró Filippo Grandi.
Boletín de prensa de la ONU
