La coordinación de esfuerzos de los tres niveles de Gobierno ha permitido establecer estrategias efectivas para combatir el incendio forestal detectado en la Reserva Estatal de Dzilam de Bravo, que hasta este día ha afectado alrededor de 500 hectáreas.
Durante los sobrevuelos del helicóptero MI-17 con el que se combate este siniestro, elementos de la Secretaría de Marina-Armada de México (Semar) pudieron apreciar lluvias ligeras cercanas al área de afectación, que ayudarían a la extinción de una parte de la conflagración.
El jefe de Protección contra Incendios Forestales de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), Manuel Mora Ugalde, informó que personal terrestre ya pudo entrar por la zona de Yalsihón, del municipio de Panabá.
Agrego que este día, combatieron el siniestro 80 elementos, pero el domingo serán cien, al sumarse enviados de la Semar y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp).
La estrategia consiste en atacar el fuego por vía aérea, mientras el equipo terrestre enfría la periferia. Sin embargo, las condiciones atmosféricas y la inaccesibilidad del terreno han complicado la contención, detalló.
Mora Ugalde reiteró que el incendio forestal sólo afecta vegetación de rápida recuperación como pasto, matorrales y arbustos.
Además, personal de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), de la Conafor, Semar y del Ayuntamiento de Dzilam de Bravo combate el incendio forestal desde las seis de la mañana, con el apoyo de embarcaciones, un helicóptero MI-17, tres camionetas y una tipo Humi de la Sedena.
Debido a las condiciones meteorológicas de tormenta eléctrica, los sobrevuelos se suspendieron a las tres de la tarde y se reanudarán el domingo desde muy temprano, concluyó.
