Inicio Análisis político Alejandro López Munguía La civilidad política distingue a Yucatán

La civilidad política distingue a Yucatán

1282

La civilidad política distingue a Yucatán.
Rolando Zapata y Mauricio Vila 1 sept 2015.jpg tresPara algunos la presencia del Gobernador Rolando Zapata Bello en la pasada toma de protesta del nuevo alcalde de Mérida, Mauricio Vila Dosal, fue más que un acto de cortesía política. Yo me quedo con el gran espíritu democrático que hace posible la civilidad. Y es que ésta es eje de la estabilidad política, que ya quisieran vivir otros estados de la república.

Los buenos oficios del mandatario yucateco, hacen posible esta enorme distinción de orden nacional. Y es que Rolando Zapata Bello es un político sensible, que proyecta con sus actos, las buenas formas que en política se deben observar para bien de la democracia. Su respeto a la Ley y su mano siempre extendida al diálogo, hacen posible la sana convivencia, siempre en el marco de la certidumbre jurídica, la justicia, el desarrollo social y el crecimiento económico.

La civilidad no es cosa menor. Es un tema delicado que implica considerar que para las fuerzas políticas en la entidad, ésta significa áreas de oportunidad.

Para el PRI, el reconocimiento que la sociedad le hace al Gobernador Rolando Zapata Bello, es una fortaleza muy sólida ante los retos que se dejan venir rumbo al 2018.

Pero, para el PAN, quizá el que más está ganando ventaja política, es el primer edil de Mérida, Mauricio Vila. Luego, luego, envió mensajes a la ciudadanía, que le están redituando aplausos, como el hecho de anunciar una rebaja en su sueldo de un 20%, o renunciar a la camioneta de lujo que el anterior alcalde tenía asignada para su uso personal, más aún la asignó a comisarías para uso como unidad de traslado.

El alcalde panista no dejó las cosas allí, decidió que el área de estacionamiento para funcionarios del Ayuntamiento de Mérida, se asigne para uso de los ciudadanos que acuden a realizar algún trámite, privilegiando lugares para las personas con discapacidad.

De igual manera, Vila renunció a su seguro de gastos médicos y al servicio de teléfono celular con cargo al erario.

Detalles, solo detalles que nos dejan ver, que el alcalde no es un aprendiz. Tal vez no sea un político graduado, pero es un profesional de la empresa que sabe de mercadotecnia y la adereza con una dosis de sensibilidad.

A la “Subway”, el alcalde Vila arma un sandwich al gusto de sus comensales.

Los que están cuasi extraviados son los otros, como los de Morena, que ni siquiera entre ellos se quieren. Triste historia porque los ciudadanos no merecen políticos improvisados. Eso de rifar las diputaciones y regiduría en una tómbola es una burla para todos.
La evidencia de mi dicho está en el Congreso del Estado, donde la diputada, estudiante de apenas 22 años, necesita colocarse unos audífonos de su celular para ir recibiendo indicaciones de sus asesores, que nadie conoce.

Tema extraño, cosa rara, ¡qué noticias hermano!, ¡qué noticias!.

Y qué decir del regidor del Ayuntamiento de Mérida que ya fue expulsado de las filas de Morena. Terrible…

En el PRD se hacen bolita para no sentir los golpes que vienen del centro del país.

Con un solo diputado, darán la batalla para posicionar diversos temas que impactan e importan a muchos ciudadanos.

David Barrera Zavala es un hombre formado en la izquierda, que sabe dialogar y sabe conectar con la ciudadanía. Se le aprecia muy dispuesto a colaborar en la consolidación de nuestra democracia y con el desarrollo de la entidad. El diálogo lo une a una mujer que con credenciales propias lidera el Congreso del Estado. Celia Rivas Rodríguez ha logrado en poco tiempo, tender sólidas líneas de entendimiento con las fuerzas principales de Yucatán, incluyendo al PAN.

Sin duda, es de resaltarse la civilidad que priva en Yucatán.

Tenemos un Gobernador que respeta a los otros poderes del Estado, generando certeza y mucha confianza en la ciudadanía.

A Yucatán le vienen cosas buenas, independientemente de las visiones particulares partidistas, así lo creo. El próximo año, el presupuesto se verá reducido por las medidas propuestas por el Gobierno Federal, que seguramente serán avaladas por el Congreso de la Unión, lo que nos meterá a todos en otra dinámica.

Ahora, para bien de todos, ya se empieza a hablar de renunciar a las prebendas y lujos innecesarios para funcionarios de todos los niveles; así como también se habla de combatir la corrupción sin miramientos.

Civilidad es abordar estos terribles temas para darle solución. La sociedad exige se le ponga un alto a la corrupción y a los excesos, y eso ya empieza a tener eco en la clase política gobernante.

Vamos bien, así lo creo. Sin confrontaciones estériles, sin oposición irracional y sistemática, sin provocaciones y sin agresiones.