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La compra de los terrenos de Chichén Itzá: una acción de gobierno visionaria

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De igual manera, en los albores del año 2003, Don Fernando Barbachano me compartió su preocupación porque el gobierno del Estado (siendo gobernador de Yucatán Patricio Patrón Laviada) le había cerrado el acceso a la zona arqueológica a los turistas desde su hotel ubicado en la misma. Eso le representaba pérdidas económicas muy serias y por ende baja afluencia turística en su negocio. Intentó negociar pero no le dieron una respuesta honesta.
El hombre estaba en realidad molesto y fue cuando pagó una inserción en el Diario de Yucatán calificando al gobernador Patricio Patrón como Corrupto. Fue un hecho histórico, muy audaz de su parte. El  empresario estaba muy molesto por la forma en la que el gobernador le trataba pues al parecer durante su campaña a la gubernatura hubo buena amistad.
Recuerdo que Don Fernando contaba sus historias personales sobre todo cuando con gran emoción relataba que fue adoctrinado por los sacerdotes mayas de Chichén Itzá.
El hecho es que hoy, la familia Barbachano vendió sus terrenos de manera legal, precisa y contundentemente transparente al gobierno del Estado. Y éste, presenta como argumento un Plan de Desarrollo Sustentable con 10 puntos a ejecutar:
1. Obtener la propiedad de la tierra donde se encuentra el área visitable de la zona arqueológica como un acto de congruencia constitucional, así como de respeto a la etnia maya y al patrimonio arqueológico de la nación
2. Plantear una nueva relación con el sector privado en la zona de la poligonal, donde se encuentra el área visitable de Chichén Itzá.
3. Establecer líneas de cooperación y de estrecha coordinación con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
4. Generar las bases socioculturales y económicas para un reordenamiento turístico, social y fundamental de preservación patrimonial por parte del Estado.
5. Participar de forma más activa en el apoyo a la investigación, la consolidación y el rescate integral de la zona arqueológica.
6. Reafirmar la función y la facultad rectora del Estado para llevar a cabo e impulsar iniciativas creativas que promuevan el patrimonio cultural e histórico de Yucatán.
7. Desarrollar en estrecha coordinación con el INAH, el Plan de Manejo de Chichén Itzá, para beneplácito y confort de los visitantes y el beneficio social de la comunidad, privilegiando siempre la legalidad y la responsabilidad compartida.
8. Reactivar la mesa de diálogo de Chichén Itzá, entre instituciones del Estado, el INAH, el sector turístico, los artesanos y los prestadores de servicios, en coordinación con el Patronato Cultur.
9. Vincular el gran proyecto del Palacio de la Civilización Maya (Museo Universal), el cual contará con la sala “Joyas de Chichén”, el Mundo Maya, el lugar de encuentro y los salones de miniaturas y astronomía con el reordenamiento turístico de la zona.
10. Fortalecer el desarrollo social y la economía en la zona oriente del Estado, en particular, en los municipios de Tinum y Yaxcabá.
Con esta acción de gobierno sustentable, se pretende detonar la economía de la región explotando al máximo las posibilidades de crecimiento en materia turística.
Sin duda, es la evidencia de que detrás de una inversión tan importante (220 millones de pesos) está la visión de un gobierno que ve a Yucatán posicionado en el marco mundial del turismo.

Es por mucho, la acción más importante que haya realizado gobierno alguno en materia turística. La deuda contraída para realizar el pago de la inversión, está garantizada con los valores de CULTUR, lo que le da certeza económica al acuerdo, mientras que a la par, se detona la zona y ésta se vuelve autofinanciable con el correr de los años.

A diferencia del gobierno federal que ofreció 8 millones de pesos a la familia Barbachano, el gobierno del Estado realizó una transacción justa y de respeto a la propiedad privada, a la que todos los mexicanos tenemos derecho constitucionalmente. ¿O es que acaso una expropiación significa abuso de autoridad?

El INAH (Instituto Nacional de Arqueología e Historia) hizo público su reconocimiento a esta noble y visionaria acción del gobierno del estado que encabeza la C. Ivonne Ortega Pacheco.
Y la familia Barbachano en voz de Hans Thies Barbachano expresó públicamente su felicitación y respaldo al gobierno por su disposición y respeto, así como todo el aval para el proyecto que beneficiará a Yucatán y a los habitantes con etnia maya en la zona y en sus alrededores.

 

Algunos datos tomados del reportaje de Rafael Gómez Chi en Por Esto