Con esta participación, México busca asumir el liderazgo político en la región, lo que le viene muy bien en estos tiempos de gran tribulación política por los resultados en contra del crimen organizado, que hasta la fecha no han sido alentadores.
El presidente mexicano pone en la mesa los temas que más le interesan: el económico, pues busca intensificar el comercio y el turismo entre países del Caribe y Sur América; el político, con su Plan de hacer un frente común en contra de la delincuencia organizada; y el social, buscando ayudar a la reconstrucción de Haití.
Buen esfuerzo político éste de la Cumbre Caricom. Habrá que ver cómo reacciona EU, que siempre ha considerado a México su aliado “incondicional”, más que por intereses, por complicidades.
No estoy seguro que éste sea un esfuerzo real o un simple “amague” del presidente Calderón para desmarcarse de EU y Canada, pero ya va siendo hora de dejar de ser “el patio trasero” del gobierno estadounidense, que no ha sido en casi nada generoso con la “amistad” que tiene con México.
Arribaron ya los grandes representantes de la América “revolucionaria” trayendo un mensaje de revolución en una nación forjada precisamente en ella, pero que pareciera desear el cambiar su historia por el legado de la “hamburguesa”. Evo Morales, Hugo Chavez, Fernando Lugo y Luiz Inacio “Lula” Da Silva vienen a estrechar lazos con México y el caribe, ojala y nos pudiéramos desmarcar de los intereses monetarios de EU para valorar nuestras capacidades reales de desarrollo y crecimiento económico.
