La OCDE reconoce como un logro histórico la implementación del nuevo sistema de justicia penal acusatorio a nivel federal y estatal en todo el país.
Con este nuevo sistema, el 100% de los juicios penales serán orales. Esto quiere decir que ambas partes, quien imputa y quien defiende, contarán con la presencia del juez en todas las etapas del procedimiento. Además, privilegia la conciliación y los métodos alternativos de justicia sobre la imposición de penas privativas de la libertad.
Este nuevo sistema, caracterizado por una mayor transparencia y eficiencia, permitirá enfrentar decididamente la criminalidad, al tiempo que se sustenta en el debido proceso y el respeto a los derechos humanos. Ello, mediante procesos más justos y expeditos.
Con este logro, se fortalece al Estado de Derecho en México, al tiempo que se responde a los desafíos que impone el mantenimiento de la seguridad pública y la procuración de justicia. Lo que permitirá generar mayores niveles de certidumbre y de confianza para fomentar el crecimiento económico y el bienestar de la población