Esta iniciativa forma parte de seis leyes y reformas que deben armonizarse al T-MEC, que entra en vigor el 1 de julio.
Es preciso crear marco jurídico que dé certeza a agricultores e investigadores y salvaguarde los derechos de campesinos y pequeños productores
Palacio Legislativo 26-05-2020 (Notilegis).- El presidente de la Comisión de Desarrollo y Conservación Rural, Agrícola y Autosuficiencia Alimentaria, Eraclio Rodríguez Gómez (Morena), lamentó que se haya decidido sacar de la agenda del periodo extraordinario del próximo lunes y martes, la discusión de su iniciativa que reforma la ley Federal de Variedades Vegetales.
No obstante, resaltó la importancia de que el Congreso de la Unión apruebe a la brevedad esta propuesta, a fin de salvaguardar los derechos de los pequeños productores y no se termine el plazo para adoptar el Convenio de la Unión Internacional para la Protección de las Obtenciones Vegetales (UPOV) 91, pues implicaría pagar regalías hasta a los consumidores.
“Es muy lamentable que se toque con tanta ligereza el tema de la producción agropecuaria, sobre todo en momentos de pandemia, pues no hay ningún país que no relacione el tema de la salud con la producción de alimentos. Es el peor error que podemos cometer, desatender la producción de alimentos”, señaló en videoconferencia.
La Junta de Coordinación Política (Jucopo) determinó retirar de la agenda la discusión de la modificación a la Ley Federal de Variedades Vegetales, que forma parte de las seis leyes y reformas que deben armonizarse con el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), que entra en vigor el 1 de julio.
Lo anterior, luego de la polémica que generó entre organizaciones de la sociedad civil como Greenpeace y Sin Maíz no hay País, quienes acusan que esta propuesta abre la puerta a la privatización de las semillas.
Sin embargo, Rodríguez Gómez sostuvo que su propuesta pretende promover el reconocimiento, registro y protección de los derechos de los obtentores de variedades vegetales, y así, salvaguardar a los campesinos de las comunidades indígenas y afromexicanas, así como a la biodiversidad y recursos genéticos.
Asimismo, establece que las variedades nativas y de uso común no son tocadas por los títulos de obtentor de las variedades mejoradas como parte de un proceso de mejoramiento genético comprobable.
Subrayó que no se plantean sanciones penales, sólo administrativas y económicas para personas o empresas que hagan uso ilegal de las variedades protegidas, con el fin de engañar a los campesinos y que buscan un uso comercial y de lucro a costa de las investigaciones.
Agregó que estas reformas también generan una oportunidad de inversión para sacar nuevas variedades que permitan incrementar la producción y regular el mercado de semillas de alta calidad.
“Hoy más que nunca se justifica la creación de un marco jurídico que dé certeza a los agricultores y a los investigadores y salvaguardar los derechos de los campesinos y de los pequeños productores para el uso de sus variedades nativas”, resaltó.
El diputado de Morena insistió en que, de no aprobarse estas reformas, en un par de años, los mexicanos estarán pagando hasta por el consumo de tortillas a las empresas trasnacionales.
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