Saber con antelación si un hijo nacerá con problemas cardíacos, espina bífida, síndrome de Down o cualquier otro tipo de anomalía es más posible que nunca. Gracias los avances en los métodos de investigación y de detección prenatales, hoy es posible detectar durante el primer trimestre de gestación una gran cantidad de patologías, lo que posibilita preparar a los padres para afrontar el embarazo.
Walter Plasencia, director de la Unidad de Medicina Fetal de Hospiten, asegura que estos avances han hecho replantear la pirámide convencional de la atención prenatal. Así, durante más de 80 años, se ha asumido que la mayor parte de complicaciones se producen a medida que se acerca el final de la gestación. Sin embargo, los nuevos estudios ecográficos que realiza la Unidad de Medicina Fetal del Hospiten permiten identificar entre la semana 11 y la 13 la mayor parte de gestaciones que tendrán algún tipo de complicación.
En este contexto, el director de la Unidad de Medicina Fetal de Hospiten afirma que en la actualidad la mayoría de las alteraciones cromosómicas importantes se pueden identificar a través del resultado de un estudio que combina las características maternas, los hallazgos ecográficos y las pruebas de bioquímica de la sangre materna.
Además, la realización de un estudio anatómico, permite diagnosticar muchas de las malformaciones que son letales o aquellas asociadas a una minusvalía importante durante el primer trimestre de embarazo, cuando tradicionalmente el diagnóstico de estas malformaciones solía obtenerse en la segunda mitad de la gestación, alrededor de la semana 20.
Otro de los problemas que se puede detectar con antelación gracias a los estudios de Medicina Fetal que realiza Hospiten, es la preeclampsia, una complicación de la segunda mitad del embarazo en la que se asocia una presión arterial alta a una pérdida de proteínas en la orina que afecta a un 2% de las embarazadas y que, en los casos más severos, puede haber peligro vital para la madre y el feto.
Desde la Unidad de Medicina Fetal de Hospiten, los facultativos médicos compaginan los últimos avances en diagnóstico con el desarrollo de una atención personalizada, que permite hacer hincapié en un enfoque más individualizado y específicos de la enfermedad que tiene cada paciente, incluyendo la estratificación de los embarazos en diferentes categorías de riesgo.
Esta Unidad de Medicina Fetal, que se puso en marcha hace cinco años, combina la atención a pacientes, con más de 10.000 gestaciones atendidas, con el desarrollo de diversas acciones en el ámbito de la investigación, que le han llevado a participar en varios congresos y estudios internacionales relacionados con la preeclampsia, en el que Hospiten colabora con otros centros de Europa.
FUENTE: http://eldia.es/
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