No hay duda de que vivimos una sociedad donde la satisfacción de las necesidades personales, familiares o grupales dependen de la adquisición de productos o servicios que se publicitan y ofertan en el mercado.
Por otro lado, la realidad económica de la mayoría de los habitantes de los países latinoamericanos nos obliga a ser más juiciosos con la oferta de esos productos o servicios. No se trata de gastar por gastar, sino que aprovechar nuestros recursos económicos que conseguimos con duro esfuerzo del trabajo de manera óptima y eficiente.
Es por ello de que los consumidores deben contar con la mejor información sobre las tendencias del mercado, del análisis de los productos y la evaluación sobre la calidad que desarrollan los expertos.
Una de esas herramientas, son la Revista del Consumidor que ofrecen información fidedigna y de confianza para poder valorar los diferentes artículos y servicios que se ofertan en un mercado nacional, extranjero o local.
En cada país, respondiendo a las características propias del mercado, existen ediciones que pueden ser producidas y distribuidas por instancias oficiales como entidades privadas. Cumplen, además, con la función de mejorar la competitividad sana dentro de un mercado, ya que las empresas que someten al escrutinio y al análisis deben mejorar su calidad enfrente a sus más cercanos competidores. Lo que las convierte en un círculo beneficioso para la consolidación de la calidad en los productos y servicios.
Por otro lado, la ventaja de la globalidad y la telecomunicación nos permite compartir en el mundo de la web estas ediciones, por lo cual, se convierte una forma de conocer las características de los mercados locales en caso de visitar un país y así conocer, de primera mano, los productos y los servicios con buena calidad o reputación. Con ello la posibilidad de ser timados o engañados disminuye.
Un tema, que va de la mano, por la importancia que tiene en función de la implicación y riesgo económico o financiero que implica, son los créditos.
En una realidad económica donde no alcanza al recurso económico para solventar las necesidades básicas, la manera de conseguir un dinero adicional se convierte en una alternativa de financiamiento. Más cuando surgen los imprevistos que viene a sacudir la estructura de un presupuesto de que por si no alcanza y surgen necesidades que se deben cubrir.
Por lo cual, es igualmente importante contar con los instrumentos necesarios para valorar las alternativas de crédito en función de sus características, implicaciones, reputación, riesgos y demás elementos de conocimiento que nos ayuden a tomar la mejor decisión que convenga a nuestro interés económico.
Se cuenta para ello, con herramientas de información como la guía de créditos personales que nos facilita analizar nuestras alternativas y ser más juicioso con el uso de esta forma de financiamiento.
Con estos elementos que sugerimos consultar e investigar los propios para cada uno de los países de lengua hispana, estamos seguros de que contribuimos a fomentar una buena cultura de consumo humano, con información de calidad, racional y sustentada.
