Inicio Análisis político Alejandro López Munguía PAN: a 76 años de vida, está vivo.

PAN: a 76 años de vida, está vivo.

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Como todo partido, el PAN tiene mucho de qué presumir y también de qué avergonzarse. El panismo es quizá, el que mejor transita en el ánimo de la sociedad en México. Su bandera es el humanismo, y por allá, está la clave de su existencia. Es el que mejor le habla a la ciudadanía, incluso cuando está en problemas alcanza a ser escuchado. Tuvo el poder y lo dejó ir. Se bañó de lodo y hoy se presenta con la cara lavada. Está vivo, a pesar de todo. Sus rivales cometen un error al minimizar sus signos de vida. Las naves se están enfilando rumbo al 2018. Raúl Paz y Mauricio Vila puntean.

 

raul paz 1 sept 2015Al cumplir 76 años de existencia, el Partido Acción Nacional, en voz de su dirigente nacional Ricardo Anaya, emprende, según sus palabras “una regeneración de las instituciones y de la política mexicana”. ¡Vaya tarea!, loable intención sin duda, ahora que inicia su gestión al frente del Partido más representativo de la sociedad mexicana. El PAN no es una institución menor, no señor, es una, que refleja fielmente la historia de nuestra nación después del reacomodo de las fuerzas políticas, económicas y sociales que se apropiaron del país bajo la bandera de la revolución. En ella se inspiraron diversos mexicanos para posicionar un deseo de país, que según sus anhelos, convirtiera a México en algo diferente, más justo, más digno y con alto sentido del bien común. Y emprendieron la senda un 16 de septiembre de 1939.

Tomado de internet del blog aminadab
Tomado de internet del blog aminadab

El yucateco Carlos Castillo Peraza fue uno de esos que a finales del Siglo XX, nutrió la lucha cívica del PAN con postulados coloquiales, que impactaron las consciencias de otros yucatecos y de otros mexicanos, para tener otra alternativa de nación. En su momento dijo “no es tiempo de inventar futuros con el pretexto de que inventar futuros salva el presente, sino es tiempo de preservar el futuro por la acción responsable en el presente”.

El PAN está lleno de grandes pensamientos que por sí solos despierta grandes emociones. Es el partido donde el humanismo se lee y se dice con fervor. Ninguna otra institución política abraza con tanta religiosidad los postulados humanistas. Sí, sus documentos tienen una filosofía muy rica.

A 76 años de fundado, el PAN puede presumir que es el único partido en todo México, que logra aglutinar a millones de mexicanos que le apuestan a tener gobiernos de corte humanista. Es claramente, una victoria histórica para los fundadores y sus descendientes políticos.

Ese humanismo los llevó a conquistar victorias electorales que marcaron la ruta de nuestra democracia. Yucatán es un estado emblema para Acción Nacional. En 1968, Víctor Correa Rachó se convirtió en el primer alcalde de Mérida, postulado por el PAN. Y con él, se puso de moda el reclamo de “fraude electoral”, al competir en 1969 por la gubernatura del Estado, al perder ante el priísta Carlos Loret de Mola Medíz.

altEn 1988 el PAN le gana al PRI la primera diputación federal con Ana Rosa Payán Cervera como candidata.

En 1990, Ana Rosa Payán se convierte en la primera alcaldesa panista de Mérida. Luego llegaron más triunfos electorales y más gobiernos del PAN en Mérida y en muchos municipios del estado de Yucatán.

Al detenerme en estos datos históricos, debo resaltar la convicción que definitivamente sellaba el esfuerzo del panismo en la entidad. Era notable el sentimiento que despertaba el compromiso de un grupo de personas que arengaban a los yucatecos a lograr el cambio.
Y el cambio llegó, aparentemente, en el año 2000 con Vicente Fox Quezada. Y casi un año después gana la gubernatura del estado de Yucatán con Patricio Patrón a la cabeza.

Fueron quizá, los momentos de gloria más intensos que el panismo haya vivido en su historia.

Pero la gloria se esfumó muy rápido.

La división interna se hizo presente, creció y se arraigó con tal fuerza que no hubo intención política que valiera. El PAN se empezó a lastimar desde adentro.

De la unidad que prevaleció durante la lucha cívica de los 60’s, 70’s, 80’s 90’s, nada quedó. El poder dividió a los azules exhibiendo su vulnerabilidad ante las mieles del poder. Del humanismo que los cohesionaba nada quedó.

En el 2007 perdieron la gubernatura del Estado frente a una mujer (Ivonne Ortega Pacheco del PRI) que venía 20 puntos porcentuales abajo. No hubo explicación oficial de la derrota, pero sí muchas razones, válidas y legítimas desde adentro del PAN: la división, la traición y la venganza.

Esos factores malditos vulneraron al PAN, que no supo reaccionar ante la campaña poderosa de Ivonne Ortega y la increíble rebelión de Ana Rosa Payán Cervera, la “siempre leal” panista.

En el 2012, el PAN perdió la presidencia de la república sin más justificación que el resultado electoral fue producto de la división y el pleito interno. Filtraciones, golpes bajos, traiciones.

La historia no miente. Los que mienten son los que niegan la realidad.

RICARDO ANAYA PANEl PAN de hoy vive una nueva etapa frente a la historia. El PAN tiene una nueva oportunidad de reconciliarse con su origen. En México, existen millones de ciudadanos que aún creen en el blanquizaul como una alternativa de gobierno. Porque el humanismo es poderoso. Es un escudo ante la corrupción. Y aunque en el PAN hay historias de galopante corrupción, sigue vivo el deseo de ver al partido humanista que es, en responsable acción.

A 76 años de vida, el PAN está urgido de reconciliarse con la ciudadanía misma. Porque está alejado de ella, gracias al egoísmo de quienes se prendieron del poder y probaron sus mieles; gracias a la manipulación que emana del poder mismo, haciéndose pasar como gente decente mientras que por debajo de la mesa se sirvieron de negocios sucios y dinero fácil. El blanquiazul se alejó del poder, porque dejó de mirarse así mismo. No le gustó lo que veía al mirarse al espejo y entonces lo rompió.

Con Ricardo Anaya al frente del PAN, el panismo se presenta como una posibilidad. Y aunque viene mermado por las luchas internas, la esperanza de levantarse y convertirse en un partido ganador es una realidad.
raul paz y vila 14 julio 2015Lo mismo sucede en Yucatán. La alianza política que hace lucir a jóvenes como Raúl Paz y Mauricio Vila, es el eje que mueve a un PAN diferente. Diferente en su discurso, en su postura, en su organización, en sus principios, en su estrategia.

Con estos jóvenes al frente del PAN, ésta institución, vuelve a verse congruente con la realidad. Y sí, aglutina a diversas voces, antiguas y nuevas en lo que parece ser una amalgama de voluntades y experiencias con un sentido verdadero.

No sé, no alcanzo a estar seguro de si el PAN tenga hoy las posibilidades de recuperar el estado de Yucatán en el 2018, pero lo que veo, es que están moviéndose y están logrando lo que hacía mucho tiempo no lograban: fortaleza interna. Basada en la unidad y la congruencia.

Nunca nadie está derrotado por siempre. El PAN viene de realizar una contienda interna estatal en la que el ganador, Raúl Paz, logró una victoria de 2 a 1 sobre su rival. Fue un triunfo contundente, por demás. El liderazgo de Paz es real. No queda duda.

vila y paz cortando rosca 6 enero 2014Paz convocó a todos los panistas a forjar un partido ganador, y señaló que solo se es ganador si se ganan las elecciones. Parece que el mensaje, la bandera de guerra impactó en el ánimo del panismo.

Si el PRI quiere prevalecer en el gobierno, tendrá que observar con detenimiento los sucesos internos en el PAN.

Paz – Vila – Huacho – Rosa Adriana – Xavier Abreu, constituyen la nueva fuerza de un panismo que se revitalizó cuidando su imagen. Es la mezcla perfecta, la fórmula para levantarse, afirman. Por primera vez, ganan una elección interna sin pleitos y sin señalamientos de compra de votos, consciencias y presiones laborales.

Por primera vez desde hace muchos años, el PAN en Yucatán demuestra bajo perfil, pero potente avance. Se están organizando silenciosamente, y con efectividad.

El discurso del PAN, apela a la consciencia cívica. Y no a la confrontación sistemática. Eso le agrada a la gente. Porque se ve a un partido decente, inteligente, que sabe hacer alianzas y lograr acuerdos positivos y halagadores para la población. Mauricio Vila Dosal es la gran evidencia de que se puede gobernar sin pleitos con otros poderes. Que se puede gobernar sin confrontaciones políticas estériles.

Así llega el PAN de Yucatán a sus 76 años de vida. A esa edad ya cualquiera es un anciano, sin embargo, PRI y PAN están más revitalizados que nunca. Se avecina pues, una batalla electoral 2018 competida. Y aunque en 24 meses Yucatán volverá a vivir intensamente la friega política, las naves están enfilándose.

El PAN está vivo, eso es una realidad.