La lección electoral del primero de julio no la aprendió el PRI, el voto ciudadano en contra del lastre de no escuchar a su militancia, la imposición a modo contrario del sentir de sus simpatizantes, es algo que simplemente ni en su lecho de muerte respeta el agonizante PRI.
La corrupción priista inicia desde el PRI y trascendió durante sus gobiernos, y sobajó como partido político las aspiraciones de la base que fue la que sostuvo los triunfos de la cúpula y élite del PRI. Sin embargo ahora a punto de que las sobras sean enterradas, el PRI da su último coletazo, da su último gemido gutural y anuncia que como PRI corrupto, es genio y figura hasta la sepultura.
Al menos, así lo destacan con su molestia priistas líderes nacionales y líderes de los estados, a razón de que hace unas horas, es decir apenas ayer por la noche, la sobrina de Carlos Salinas de Gortari, la dirigente nacional interina del PRI, Claudia Ruiz Massieu Salinas presentó su candidatura ante la Comisión Nacional de Procesos Internos del PRI a la presidencia nacional de su partido para un periodo que culminará en agosto del año entrante, que será hasta cuando los priistas tendrían una nueva oportunidad para elegir a un nuevo dirigente para un nuevo lapso de cuatro años. Que por ahora dicho privilegio y derecho les ha sido negada a la militancia.
Como se recordará, la actual dirigente interina del PRI, es la cuarta que se ostenta como presidenta nacional en el periodo que inició en 2016 con Manlio Fabio Beltrones y quien fue sustituido por Enrique Ochoa Reza, y posteriormente por René Juárez Cisneros.
Ella, Claudia Ruiz Massieu Salinas, fue muy puntual y aparentemente lleno todos los requisitos para su inscripción.
Sin embargo, también se registró y así lo hizo sin la bendición de nadie, el diputado federal priista Rogelio Audiffred, quien según trascendió, sólo acreditó dos de los 16 requisitos previstos en la convocatoria. Sin embargo aún con la incompleta llenada de requisitos, por parte de uno de los aspirantes, la Comisión de Procesos Internos acepto la inscripción y con ello abrió y a la vez cerró esta noche el registro de candidatos, y se informó que el Consejo Político Nacional del PRI está convocado para este martes 21 a las siete de la noche, cuando votará quién terminará este periodo de la dirigencia nacional priista. Lo cual ingenuamente es a todas luces anti democrático ya que no habrá elección, sino ratificación del dedazo que va dirigido a favor de Claudia Ruiz Massieu Ruiz Salinas.
Está más que cocinado que Ruiz Massieu ocupe la presidencia del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI hasta agosto de 2019, para concluir así el periodo para el que originalmente fue electo Beltrones Rivera.
Empero, como señalamos, hay voces que claman en el desierto, cómo pasó en el momento del registro, cuando el diputado Audiffred denunció públicamente que este el del PRI, es un un proceso viciado, a razón de que la actual presidenta interina del partido es “juez y parte” en este trámite de relevo.
Ramón otros grupos como la corriente Democracia Interna, que encabeza el exgobernador Ulises Ruiz, también han manifestado estar en contra de las decisiones cupulares y demandan la votación directa de la militancia.
En los estados hay pronunciamientos en contra de lo que es un dedazo más del moribundo PRI, e incluso analistas políticos nacionales realizan comentarios en sus columnas de hoy, de esto que pone al PRI en una más de sus oscuras decisiones de cúpula en contra de su militancia, quien aún no se repone de su derrota ante una masiva votación anti corrupción que llevó al ex priista Andrés Manuel López Obrador a la Presidencia de la República publica.
En círculos también de alto nivel político al interior del PRI, ya se maneja que quien sería impuesto para ser secretario general del PRI y quién podría acompañar a la sobrina de Salinas de Gortari, es el aún Gobernador priista de Yucatán Rolando Zapata Bello, quien su candidato a gobernador Mauricio Sahui Rivero perdiera la elección en esa entidad.
