Inicio Análisis político Alejandro López Munguía ¡Salte hijueputa!… el nuevo grito de guerra del PRI en Yucatán.

¡Salte hijueputa!… el nuevo grito de guerra del PRI en Yucatán.

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  • A los atributos que ya posee: traición, mentira, maquiavelismo, mediocridad, doble discurso, insensibilidad, irresponsabilidad, hay que agregarle la violencia, la ira, la intransigencia y la intolerancia.

Te va a interesar leer sobre la violencia que denunció Lucely Alpizar:

https://www.mipuntodevista.com.mx/no-apoyo-a-gaspar-quintal-y-denunciare-por-violencia-de-genero-lucely-alpizar/

Mientras la cúpula del PRI yucateco, encabezado por el impuesto presidente estatal, Gaspar Quintal Parra celebraba su “exitoso” arribo a la Casa del Pueblo, la empresa televisiva Telesur movía en redes sociales un vídeo donde relató el testimonio de ciudadanos que aparentemente acudían de forma “libre y convencidos” a la toma de protesta del susodicho. El reportero que realizó el reportaje calificó el hecho como un vil acarreo, a la vieja usanza.

A la pregunta de ¿sabe a qué viene?, todos los entrevistados respondieron con un rotundo “NO”.

El vídeo, de forma puntual, dio cuenta del acarreo de gente que asistió sin saber exactamente a qué iba y a quien estaba apoyando.

Lo grave de todo, es que en el vídeo se mostraron imágenes de la irreal convocatoria de priístas “convencidos”. Hubo grandes espacios vacíos y decenas de sillas sin ocupar. De hecho, en sus tomas se ve claramente cómo acomodaron a la gente para que se vieran las primeras filas repletas, lo que ayudó para que las tomas en fotografías proyectaran un lleno completo. La verdad es que atrás la vista era deprimente.

También se pudo observar cómo los acarreados abandonaron el evento, incluso antes de que hablara Alito Moreno, líder nacional del PRI.

En el acto, brillaron por su ausencia los sectores: campesino y de trabajadores, que en el pasado fueron pivotes de la movilización de las masas populares.

En su boletín a los medios, como dato extraordinario, se pudo apreciar que la presidenta de la FENAMM, Hiselle Díaz, evitó “quemarse” con Gaspar y con Alito, pues acompañó el boletín con dos fotos exclusivamente de ella haciendo uso de la palabra.

El video de Telesur exhibió al grupo político que a partir del viernes asumió la dirigencia estatal del PRI en la entidad. En especial cuando dio cuenta de un bochornoso, por demás vergonzoso acto público, que protagonizó un político muy famoso, padrino de una generación de políticos que gobernaron el sexenio pasado: Carlos Sobrino Sierra.

Mientras coordinaban la llegada de la gente acarreada, un ciudadano se asomó por una puerta y gritó a voz en cuello: “¡EL PRI ESTA MUERTO!”, lo que desató la ira del veterano político, Carlos Sobrino Sierra, que le encaró, inmediatamente fue separado por dos jóvenes, pero regresó a enfrentar al ciudadano al tiempo que le gritaba retador: “¡SALTE HIJUEPUTA!”. El hombre estaba furioso. El asunto no alcanzó otro nivel de violencia, gracias a la intervención de varias personas responsables que le pusieron calma al embrollo.

El video en comento fue compartido en las redes sociales, donde se generaron múltiples comentarios, de parte de la dirigencia no hubo una disculpa, alguien comentó “no ofrecen una disculpa, porque siguen creyendo que en Yucatán son los poderosos de antes”. “Es la soberbia que los caracteriza”, comentó otro vecino.

En los tiempos de las benditas redes sociales, resulta mortal no cuidar las formas. El pasado viernes 26, el PRI demostró que vive en el pasado, que no nos equivocamos cuando presagiamos la consolidación de la podredumbre política, ¿a quién se le pudo haber ocurrido hacer una concentración fallida?. ¿Creyeron que impactarían positivamente a la población?.

Carlos Sobrino Sierra mostró el verdadero rostro del PRI que representa Gaspar Quintal Parra, quien hasta ahora no ha ofrecido una disculpa pública a los ciudadanos que se sintieron agredidos. ¿Cómo podría extrañarnos esa actitud cuando sabemos el fondo de los acontecimientos violentos del 4 de julio de 2011?. ¿Cómo podría extrañarnos, si el cerebro de esa golpiza hoy dirige los destinos del moribundo PRI?. Además de todos los atributos que posee, traición, mentira, maquiavelismo, mediocridad, doble discurso, insensibilidad, irresponsabilidad, hay que agregarle la violencia, la ira, la intransigencia y la intolerancia.

¿Que las cosas fueron obra de la casualidad?, – nada en política es casualidad.