De ganar “Amlito” Moreno, destituirían a Panchito Torres y a Lila Frías, de la presidencia y de la Secretaría General del PRI en Yucatán.
— Más que una posibilidad, esto se empieza a configurar en un objetivo post campaña. Detrás de este perverso propósito, están los intereses que usaron a Diego Lugo para destruir al partido.
El resultado de la contienda interna por la presidencia del Comité Ejecutivo Nacional, será determinante para definir definitivamente la elección interna celebrada en Yucatán, el pasado mes de abril y en la que resultó vencedora la fórmula de Francisco Torres Rivas y Lila Frías.
Y es que, la denuncia de Diego Lugo ex candidato perdedor, aún sigue su curso en otras instancias. De resultar ganador Alejandro Moreno Cárdenas, “Amlito”, el PRI en Yucatán se quedaría sin dirigencia, toda vez que el equipo de Diego en la entidad es el mismo equipo del gobernador con licencia de Campeche y exige venganza.
Las presiones son muchas, y por tratarse de intereses irreconciliables, el equipo de “Amlito” no quita el dedo del renglón. “Cuando gane Moreno, rodará la cabeza de Panchito” le prometieron a Diego.
La relación de Diego Lugo con Panchito Torres y Lila Frías está maltrecha. El PRI se dirige hacia una ruptura interna de tamaños inconfesables. Los odios se avivaron tras la contienda local y amenazan con destruir la poca credibilidad que la sostenía.
Panchito Torres no ha terminado de nombrar a todo su equipo de trabajo, lo que bien podría quedarse así en caso de ser destituido.
Es creíble el tema, por cuanto se está jugando. “Si le roban la elección a Ivonne Ortega, seguro irán por todo, incluyendo la destitución de Panchito”, se afirma en el círculo rojo de la campaña.
Si esta versión es cierta, toca pues, que no gane “Amlito” porque el prestigio y la carrera de Panchito saldrán dañados.
