Cuatro apartados marcan las etapas de la historia de amor, por Silvia, que Jorge vive y relata en esta novela publicada en su colección Talento Caligrama que promueve a nuevos autores. Las secciones son “Tiempo”, “Milenio”, “Promesa” y “Rutina”. El título será presentado en al Feria Internacional del Libro de Coahuila y en la Feria Internacional del Libro de León, este 2019.
En primera instancia, “Tiempo” es precedido por un Prólogo y una carta firmada en el año 1999 en Roma, luego nos ubica en el entorno de la infancia de Jorge quien nos presenta, de uno en uno, a sus amigos más cercanos Manuel y Alex; luego a Silvia, la niña de trece años que le robó el corazón siendo él un joven de dieciséis. Más adelante todos irán creciendo y eligiendo su rumbo.
La construcción de personajes, situaciones y el manejo del lenguaje corresponde muy bien a lo que sucedía en la juventud mexicana nacida entre 1970 y 1980, “los ochenteros”, como se les conoce en la actualidad, por lo que no sólo los jóvenes en víspera de enamorarse podrán identificarse en esta historia, los ochenteros -como el autor- tendrán mucho en común con lo que sucede en las páginas de Silvia.
En entrevista José Memun refiere que, en el desarrollo de su obra, tuvo presente que el lector busca adentrarse en la personalidad y sucesos de los personajes sobre los cuales se está leyendo y entender porque hacen lo que hacen en determinadas atmósferas y donde convergen entre sí.
“La ventaja que tiene una historia como esta es su dualidad: dibuja una época del México de finales de los 80 y principios de los 90 de una sociedad determinada de cierto aspecto en cierto lugar; transmite el sentimiento y acciones de la gente considerando las herramientas que tenía a la mano, como se desarrollaba, se desenvolvía e interactuaba. Por otro lado, también presenta hechos que implica la adolescencia, el sentimiento de enamorarse por primera vez y ser capaz de saltar cualquier obstáculo, no dejarse vencer y salir adelante con los medios que se tienen al alcance en esa etapa”.
Las canciones del momento, grupos musicales, bazares, teléfonos con disco para marcar, los walkman, y otros enseres, aparecen en escena. Es inevitable regresar a la época para acompañar a Jorge en los sucesos que lo relacionan con Silvia e incluso subirse al avión con él para vivir la travesía en busca de la continuación amorosa.
Cuando Memun inició la escritura de este texto, no había la intención de publicarlo, se trataba de un proyecto muy personal que fue creciendo. Es poco visto que sea un hombre quien narra su historia y en este caso le pareció importante que fuese “Jorge quien describe la vida de esta mujer tan sorprendente y como a él le marcó la vida Silvia. Que mejor que sea él quien lo narre”.
“Milenio” da título al apartado donde se narran sucesos, ocurridos desde en verano del mítico año 2000 en el que se esperaba el fin del mundo, el encuentro de Jorge y Silvia -ya más adultos- en otro país y la partida de ella hacia Berlín donde afrontaría nuevas experiencias. En “Promesa” las vidas de los personajes van dando giros en los que coinciden y otros en los que se alejan. Las rutas son las mismas y de pronto otras. Las experiencias fortalecen, premian, decepcionan y llevan a la reflexión, al regreso a casa, incluso a la pérdida de seres queridos y, finalmente, en “Rutina” la historia muestra el resultado de las decisiones tomadas por unos, como Manuel y Alex, y otras -la propia Silvia-, al igual que las segundas oportunidades de vida en pareja que de pronto un adulto mayor puede tener y los hallazgos que se concretan tantos años después.
Silvia no es en ejercicio en el que se proyecte parte de la vida del autor, aunque reconoce que “si hay tintes de cosas que no nada más viví yo, sino que lo vi en alguien o que yo mismo hubiera querido vivir. Busco transmitir más que nada las sensaciones de la época. Siempre es bonito recordar. No sé por qué las épocas pasadas serán mejores que las actuales”. “En Silvia se refleja esa melancolía que nos queda a todos los de esa generación, es lo que puedo decir que la novela tiene de mí.”
Parte del mensaje que el autor desea transmitir a los lectores es “nunca dejen de recordar y aprendan lo mejor que de lo que han vivido. Por otro lado, es que sin importar el reto que se tenga, hay que ir hacia adelante y no conformarnos con lo que tenemos en frente”. “Son mensajes que a mi me funcionaron en una época difícil como es cuando estás tratando de consolidarte como un adulto joven.”
Actualmente Memun trabaja en la que será su segunda novela y llevará el título La mujer de mi entierro en la que reúne recuerdos y sueños sorpresivos, convulsos, desesperados y perturbadores.
Recientemente estuvo en el Festival Internacional de Escritores y Literatura en San Miguel de Allende y participará pronto en Feria del Libro de León y en la Feria Internacional del Libro de Coahuila.
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