Mientras no haya una vacuna o un medicamente efectivo contra el Covid-19 tampoco habrá condiciones para una nueva normalidad y las salidas fáciles para atender la emergencia “no nos van a llevar a ningún lado”, destacaron especialistas en la segunda jordana del foro “¿Qué hacer para enfrentar la crisis económica, desde la óptica del Poder Legislativo?
En el encuentro virtual, la senadora Mayuli Latifa Martínez Simón, del PAN, destacó la importancia de expedir la Ley de Emergencia y Recuperación Económica, que establezca reglas claras para la promoción y fomento de la inversión y precise en dónde y cómo va intervenir el Estado y la iniciativa privada.
También se requiere un consejo consultivo donde se diseñen las estrategias a seguir ante contingencias como las que estamos viviendo, así como procedimientos y medidas de apoyo financieras, fondos de contingencia o participaciones federales para los estados.
El proyecto de ley, señaló la legisladora, tiene que asegurar un mínimo de protección para los sectores más vulnerables. Además, dijo, se requiere establecer un ingreso básico universal, la exención del ISR a quienes ganan menos de 10 mil pesos y que se puedan suspender el pago de hipotecas de interés social.
Manuel J. Molanco, director General del Centro de Investigación en Política Pública (IMCO), indicó que tendrá que haber nuevos esquemas que generen flexibilidad para que cada familia decida si requiere recursos para su hogar, para un seguro médico o para tener un retiro digno.
Es fundamental que el Estado trabaje no sólo en la recuperación económica sino también en disminuir los índices delictivos y apoyar a los que menos tienen. Se necesita un sistema de salud universal y de calidad para enfrentar este tipo de crisis, añadió.
A su vez, Ricardo Fuentes Nieva, director Ejecutivo de OXFAM México, señaló que el Estado tiene que poner en marcha acciones concretas para proteger a las personas de escasos recursos y que viven al día.
Advirtió que los más afectados por la pandemia tienen una dicotomía de vida o muerte, en salir a buscar el sustento diario o proteger su salud, y son aproximadamente 12 millones de personas en edad laboral que no tienen empleo y no son población objetivo de los programas existentes.
Estamos a favor del ingreso vital temporal por lo menos tres meses para asegurar que las personas que no pueden salir a trabajar no se queden sin sustento y en condiciones de pobreza, puntualizó.
José Castellanos Pérez, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación, consideró que mientras no haya una vacuna o medicamento efectivo no habrá condiciones para una nueva normalidad”.
En este contexto, agregó, es la pertinencia de un salario solidario y emergente, que se mantenga durante un periodo de seis meses para apoyar a trabajadores informales y desempleados.
Habrá que considerar, puntualizó, prórrogas y facilidades en el pago provisional del Impuesto Sobre la Renta durante el resto del año, adelantar el gasto público por lo menos en cuatro por ciento del PIB, aumentar la base de recaudación, así como una reforma fiscal donde se les cobre más a los que más generan.
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