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Vamos a construir un buen proceso electoral

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Mtra. Jessica Saiden Quiróz. Delegada del Conafe Yucatán.

Vamos a construir un buen proceso electoral

 

 

Todos los días representa una magnífica oportunidad de forjar el destino que queremos.

 

Cada instante, cada momento, cada elección nos aleja o nos acerca más a nuestros objetivos personales o profesionales.

 

Los días son una batalla nueva, una serie de metas regeneradoras al interior de nuestro Ser, por lo que mantener ese espíritu consciente de esfuerzo debe estar acompañado de aquellos valores necesarios para la construcción positiva de cualquier proyecto.

 

La política como instrumento práctico de hacer bien las cosas desde el principio, desde la génesis, con orden y respeto a las instituciones establecidas debe estar instituida de raíz, en las prácticas de todos los aspirantes a servir a un cargo público.

 

Ocupar un cargo público, acompañar los avances sociales y recibir el cariño de la comunidad jamás debería ser tomado con ligereza; al contrario, es una altísima responsabilidad recibir la confianza de la gente.

 

Ejercer la buena política en todas sus formas es un imperativo categórico, aquel concepto de la ética kantiana el cual pretende ser un mandamiento autónomo y autosuficiente, capaz de regir la conducta humana, es decir, hacer las cosas como deben ser, sin necesidad de sentirnos obligados – por ley, religión o ideología – a realizarlo.

 

Oficialmente, estaremos iniciando el proceso electoral rumbo al 2018, año histórico y definitorio en el destino de más de 100 millones de mexicanos y mexicanas.

 

En un solo domingo, tomaremos la decisión que marcará los siguientes 6 años de nuestras vidas en su amplio espectro de acción: el económico, la seguridad, las políticas sociales, la infraestructura y otras de gran interés para el entorno en el que vivimos.

 

Resulta importantísimo votar y estar pendientes de tener actualizado la credencial para votar, siendo ésta nuestra principal “arma” ciudadana. Quien no vota por desidia o por rebeldía lejos de aportar algo a la democracia, se perjudica a sí mismo y coloca una pesada losa al futuro de las siguientes generaciones.

 

Importante será también, convencer a los jóvenes, a los llamados millennials, chavos y chavas que hoy tienen entre 20 y 35 años, porque su ideología y su forma de ver la vida es diferente, es reflejo de un país distinto, en donde predominan algunos estereotipos y en los cuales, el Internet y las redes sociales jugarán un papel determinante.

 

A partir de mañana, 8 de septiembre comienza entonces, una primera veda electoral, misma que impedirá propaganda, pautas publicitarias partidistas en donde se promueva la imagen de candidatos, funcionarios o voceros que aspiren a un cargo de elección popular el siguiente ciclo electivo.

 

No hacerlo, podría impedir el registro, según lo marca el Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE), árbitro y juez que tendrá en sus mesas una trascendental función reguladora y fiscalizadora.

 

La cancha pareja, piden todos los involucrados, actores e institutos políticos claman sus contrapartes no serán beneficiadas con antelación, sin embargo, el ejemplo empieza en casa, exigirnos como partidos políticos respetar a las autoridades electorales es el primer paso.

 

Previo a las pre-campañas, este momento es una magnífica oportunidad para trabajar en lo interno, en las estrategias en pequeño, en los que se privilegie la reflexión y la introspección de qué se le ofrecerá al electorado cuando se dé el banderazo de salida.

 

Vamos a estar muy atentos de que no se violente el Estado de Derecho ni a sus instituciones. Estaremos en momentos complejos en los que la situación no permite ni permitirá una división entre mexicanos, más unidos que nunca tenemos que afrontar este escenario político.

 

Empieza la cuenta regresiva, 296 días nos separan del primer fin de semana de julio, entonces, empecemos a vivir esta fiesta cívica con orden, respeto, inclusión y pluralidad.

 

Deseamos candidatos y candidatas que no tengan miedo de expresar su sentir, impulsemos las propuestas, el intercambio de ideas, pero ideas sustentadas en la lógica y en los números, en las estadísticas, en lo factible que pueda ser alcanzar una meta.

 

No caigamos en las promesas falsas e inalcanzables, la exacerbada demagogia es un peligro para las sociedades establecidas que ya tienen un rumbo definido.

 

Los partidos e instituciones políticas del color que sean, tienen el deber histórico de seleccionar a hombres y mujeres preparadas, capaces de integrar una plataforma inteligente, basada en sus respectivas capacidades de construir una plataforma certera.

 

Siendo ciudadanos tenemos que estar bien informados, no caer en la tentación de confiar en historias no verificadas, de no dejarnos enamorar por noticias falsas, cuya intención es denostar al candidato rival, siempre preguntemos y a partir de ahí, formemos un juicio propio e independiente.

 

¡Que empiece este momento histórico para México y para Yucatán!

 

Muchas gracias por su amable lectura y espero sus comentarios a [email protected]