Inicio Análisis político Alejandro López Munguía #Yucatán. FONDEN, entre la mezquindad y la esperanza.

#Yucatán. FONDEN, entre la mezquindad y la esperanza.

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FONDEN, entre la mezquindad y la esperanza.

La población afectada por las inundaciones que generó la tormenta tropical “Cristobal”, condena firmemente que por una burocracia extrema, obsecada y absurda, se les nieguen los recursos del Fondo Nacional de Desastres Naturales (FONDEN). Los servidores públicos del gobierno federal rechazan una tras otra las peticiones de ayuda de la población vulnerable. Se basan en lineamientos que parecen estar establecidos para negarlo todo y no auxiliar a la gente lastimada. Así, una familia cuya casita de láminas de cartón se destruyó no encuentra respuesta, pues lo más que le pueden dar son láminas, y nada más.

Para ir a fondo del asunto, vale la pena recordar cuál es el fundamento por el que se instituyó el FONDEN. Por definición el FONDEN es un instrumento de coordinación intergubernamental e interinstitucional que tiene por objeto ejecutar acciones, autorizar y aplicar recursos para mitigar los efectos que produzca un fenómeno natural perturbador, en el marco del Sistema Nacional de Protección Civil.

Como se lee, fue creado para ayudar a la población éstas situaciones críticas de desastre.

Queda claro que la esperanza de la población vulnerable está cimentada en el apoyo del gobierno para salir con fortaleza, de la tragedia vivida.

Pero en vez de recibir una buena noticia, una que los aliente y les proporcione un poco de luz en la oscuridad por la desesperación, reciben negativas. “No califica”, “los lineamientos son muy claros”, “Si tu casita era de láminas de cartón y la perdiste por la inundación, solo te podemos dar láminas”, “si tu casita era de mampostería no te podemos reponer nada porque no era de bloc’s”, son respuestas más comunes que los servidores de la nación proporcionan a las familias afectadas.

El espíritu de solidaridad con el que se fundó el FONDEN quedó enterrado. Nada quedó de ello. Ahora se trata de ahorrar todo lo que se pueda, porque esa parece ser la instrucción. La prioridad no es darle ayuda al pueblo, sino hacer cumplir los lineamientos que no conceden nada.

¿De qué sirve el FONDEN si no se respeta su espíritu de ayuda solidaria?.

En esto deberían pensar quienes tratan de justificar la negación de los recursos del FONDEN para la gente vulnerable.

El dinero del pueblo, porque el FONDEN es dinero del pueblo, debe ser aplicado con generosidad y responsabilidad. Y cuando hablo de responsabilidad resalto el lado amable, sensible de ayudar a quienes en estos momentos están sufriendo por la pérdida de su patrimonio.

Ojalá y recapaciten los funcionarios del gobierno federal y entiendan su deber con la población. La gente que más está sufriendo es aquella por la que Andrés Manuel López Obrador se convirtió en Presidente de la República.

Por ningún motivo el FONDEN debe politizarse, porque se trata de la población y de la más vulnerable.