Si bien la economía mexicana se recupera lenta y paulatinamente, esto se produce de manera desigual entre los distintos sectores productivos que la componen. Justamente por ello, el Gobierno ha dispuesto una serie de medidas de asistencia financiera y ayudas sociales con el propósito de incentivar la recuperación de las PYMES, los emprendedores y trabajadores en general.
Contexto económico y políticas de fomento
La recesión económica que atravesó el país afectó a muchos sectores, especialmente a la pequeña y mediana empresa, y redujo el acceso a la vivienda y profundizó la crisis habitacional. No es ninguna sorpresa, puesto que el sistema financiero en general endureció las condiciones de contratación de créditos y préstamos para estos sectores, justamente porque estos percibieron una fuerte caída en sus ingresos y en su rendimiento en general, lo que finalmente perjudica su capacidad de pago y el interés de las entidades de finanzas y préstamos. Pese a ello, el Gobierno se ha dado por enterado y ha implementado una serie de medidas de asistencia social y financiera para el desarrollo productivo.
Crédito a la Palabra para PYMES
Esta medida se implementó durante el año pasado como una manera de financiar y solventar la actividad de empresas pequeñas y medianas cuya solvencia se haya visto afectada por la pandemia. La medida comprende la acreditación de un crédito muy sencillo de tramitar cuyos requisitos son relativamente bajos. Los beneficiarios reciben 25 mil pesos en caso de estar al día con sus obligaciones tributarias y condiciones de empleo. La adjudicación de estos créditos supone un periodo de gracia de tres meses antes comenzar a pagar.
Los requisitos para solicitar el Crédito a la Palabra son varios, aunque mínimos. En primer lugar, se debe con una clave del registro federal de contribuyentes. En segundo lugar, la presentación del formulario de administración tributaria 32-D sobre el cumplimiento de las obligaciones fiscales. Por último, debe registrarse la firma electrónica del interesado y disponer de una cuenta bancaria.
El crédito se solicita de manera online en la plataforma del IMSEC MX.
Crédito para la vivienda
El Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado dispone de una línea de créditos dedicados exclusivamente a la adquisición de una vivienda. Se inscribe como una de las tantas asistencias sociales para solucionar uno de los grandes efectos de la pandemia y de la recesión económica sobre las familias.
Los requisitos que la entidad solicita son una carta de aprobación del banco, un historial de crédito positivo y, por supuesto, los datos personales correspondientes. El interesado debe ser mayor de edad y encontrarse en relación laboral formal. No debe disponer de una pensión laboral y debe registrar la solicitud en un banco nacional.
Una vez presentados estos requerimientos, la entidad debe analizar la información y decidir si la persona recibirá o no el crédito. Debe recordarse que este programa de ayuda está destinado a personas con mayor necesidad, por lo que su solicitud tendrá prioridad.
Las dificultades económicas de las pequeñas y medianas empresas tienen una incidencia directa en el sector laboral y en la economía en general, ya que este sector ocupa alrededor del 70% de la fuerza laboral del país. Es por ello que se trata de iniciativas complementarias; el crédito a la PYME genera trabajo, mientras que las ayudas sociales de acceso a la vivienda suponen una mejor calidad de vida.
