El presidente de la Junta de Coordinación Política, Francisco Martínez Neri, sostuvo que en 2015 se registraron casi 130 mil casos de violencia contra las mujeres de acuerdo con el Banco Nacional de Datos e Información sobre casos de Violencia contra las Mujeres.
Durante la inauguración del Primer Encuentro de la Conferencia Nacional de Legisladoras 2016, el coordinador del PRD en San Lázaro añadió que el tipo más común de violencia perpetrada en contra de la mujer es de índole psicológica, con más de 60 por ciento de los casos registrados, y el principal agresor suele ser un familiar, en un 85 por ciento.
La violencia extrema contra las mujeres son los feminicidios. En México cada día se asesina en promedio a siete mujeres, que al año son casi dos mil 600 homicidios, datos que patentizan la ineficacia de las políticas públicas para erradicar esa violencia, que es cada vez más atroz.
La espiral de discriminación y violencia contra las mujeres sólo puede detenerse cuando el Estado actúe con determinación y firmeza, no sólo contra quienes la ejercen como práctica cotidiana, sino para transformar los factores estructurales que la alimentan y reproducen, como son la desigualdad, la cultura patriarcal, el machismo y la misoginia, indicó Martínez Neri.
“El problema es mayúsculo, su atención pasa por el establecimiento de medidas legislativas y de políticas públicas de prevención, atención y sanción, entre las que se encuentran la protección y justicia para las mujeres víctimas de violencia”.
Consideró urgente realizar una política de cero tolerancia a la violencia contra las mujeres por razones de género, asumida como prioridad del Estado mexicano en su conjunto, sumando esfuerzos los tres órdenes de Gobierno y en los Congresos estatales y federal.
A esta grave problemática, precisó el presidente de la Jucopo, se suma el abuso sexual. En México los datos son alarmantes de acuerdo con la OCDE, ocupando el primer lugar a nivel mundial en abuso sexual de menores de 14 años; del total, 77 por ciento de las víctimas son niñas, con un promedio de edad de 5.7 años.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU), por su parte, ubica a México en el quinto lugar mundial en lo concerniente a comercio sexual infantil; al menos 250 mil niños y adolescentes están en esa actividad. Asimismo, es catalogado como país de origen, tránsito y destino de víctimas de explotación y turismo infantil, principalmente en Acapulco, Cancún, Tijuana y Ciudad Juárez.
La vicepresidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Gloria Himelda Félix Niebla (PRI), apuntó que este encuentro permitirá a las legisladoras federales y estatales, presidentas municipales y demás mujeres que se encuentran en espacios de decisión debatir sobre cómo se puede armonizar y actuar en una sola directriz para fortalecer la ley enfocada al sector femenino.
Desatacó que la LXIII Legislatura está conformada en 42 por ciento por mujeres, que ha permitido establecer un gran avance en la paridad; lo cierto es que aún hay rezagos en los ámbitos familiar y civil; uno de ellos es cumplir con lo ordenado por la Fondo para la Infancia de las Naciones Unidas (Unicef) para prohibir matrimonio en menores de edad.
En este sentido, subrayó, es fundamental realizar estrategias para que la autorización del consentimiento de matrimonio no sea otorgada por los padres, ya que a veces son ellos quienes lastiman a sus niñas al casarlas a temprana edad.
Otro tema que tendrá que ser atendido con prontitud es hacer cumplir lo establecido en el Código Civil, a fin de castigar a quienes oculten la percepción de su salario y con ello evadir la obligación de dar pensión alimenticia.
El coordinador del grupo parlamentario del PRI, diputado César Camacho, anunció que en esta cámara se está diseñando un protocolo para legislar con perspectiva de género, y así estar a la par de lo que la Suprema Corte de Justicia de la Nación implementó con su guía para resolver controversias con perspectiva de género.
Dicho mecanismo contribuirá a que en las normas jurídicas y en las políticas públicas no se corra el riesgo de malas interpretaciones, se requiere “del sello indeleble que tenga presente la perspectiva de género”.
Mencionó que de los 20 países más desarrollados del planeta, entre ellos, Reino Unido, Francia, Alemania y Estados Unidos, “somos la nación que tiene el mayor porcentaje de mujeres en la integración de su Cámara baja. Esto es reflejo de una voluntad política y de un compromiso férreo con la causa de la igualdad”.
César Camacho resaltó que las mujeres hacen la diferencia en política; en términos de igualdad jurídica hay idénticos estatus; hay constancia de la capacidad, trabajo, sensibilidad social, perseverancia, lealtad y honradez que encarna a las mujeres; por eso su presencia en la política es indispensable.
“Juntos con la igualdad sustantiva y sin adjetivos entre mujeres y varones, se necesita impulsar una nueva masculinidad, es decir, cambios de actitudes de los señores precedidos por un cambio cultural. La Igualdad es el alma de la libertad”, añadió.
Relató que en el ámbito legislativo y por primera vez en la historia, se acordó impulsar la maestría en equidad de género, la cual imparte la Universidad Nacional Autónoma de México a legisladoras, legisladores y al personal de apoyo. Propuso recopilar textos y grabaciones de la maestría para elaborar una obra escrita que sea difundida en medios digítales, para que todos los interesados en esta materia se beneficien.
El diputado Camacho señaló que la Conferencia Nacional de Legisladoras (Conaleg) es un reconocimiento para rendir homenaje a aquellos personajes que han luchado por la igualdad sustantiva entre hombres y mujeres.
En su intervención, la presidenta de la Comisión de Igualdad de Género, Laura Nereida Plascencia Pacheco (PRI), expuso que el encuentro de legisladoras es un órgano de diálogo permanente, de acuerdo y voluntad política que busca fortalecer la coordinación y la corresponsabilidad entre los tres órdenes de gobierno, principalmente en el Legislativo.
Esta conferencia nacional, detalló, tiene como objetivo impulsar la creación, reformar o derogar diversos ordenamientos para asegurar la igualdad de facto, garantizar la salud y derechos reproductivos, poner fin a la discriminación hacia las mujeres, y eliminar de toda la legislación, prácticas nocivas como el matrimonio precoz y forzado.
Este espacio no puede ser un acto político, sino oportunidad para incorporar la perspectiva de género en cada legislación local y con ello proteger los derechos humanos de las mujeres, lo cual contribuirá a atender la recomendación de la CEDAW para armonizar todos los marcos jurídicos mexicanos en materia de perspectiva de género.
Hay muchos retos. La violencia es una de las mayores ofensas y falta a los derechos humanos, y en nuestro país 7 de cada 10 sufre violencia.
Si bien es cierto existen avances en el marco jurídico fuerte y sólido, es insuficiente porque todavía se registran siete asesinatos de mujeres por discriminación de género y, anualmente, se presentan más de 900 mil violaciones a derechos de niñas y mujeres “con impunidad” y cerca de mil 200 menores entre 10 y 15 de edad se convierten en madres.
“Debemos dejar a un lado los intereses y trabajar en beneficio de las mujeres y crear agendas conjuntas que logren una verdadera paridad de género”, concluyó.
Carolina Monroy Del Mazo (PRI) mencionó que a veces se quieren solucionar los problemas haciendo leyes; sin embargo, estas no lo resuelven todo, ya que se necesitan autoridades responsables y políticas públicas que garanticen el ejercicio y respeto de los ordenamientos en la materia, además del trabajo en equipo de las mujeres.
“Ojalá llegue el momento de que hablar del reconocimiento de los derechos humanos de las mujeres no sea algo excepcional, sino que se considere algo circunstancial. Asimismo, que los índices de violencia formen parte de una antigua estadística”.
En representación de Movimiento Ciudadano, Mirza Flores Gómez expuso que necesitan armonizarse las leyes e integrar una agenda de las mujeres para garantizar que sus derechos no sean vulnerados, ya que “a las mujeres se les exige el doble y se les perdona la mitad, ya llegamos, ahora debemos dar resultados”.
La inclusión de las mujeres en la política es consecuencia de las demandas a partidos e institutos electorales porque a las mujeres no se les da dinero para competir, “nos ven como cosita que quiere ganar, pero no habrá dinero, los empresarios no nos consideran una apuesta para preservar sus intereses, los políticos se sienten amenazados, no nos están esperando con los brazos abiertos”.
De Morena, Concepción Villa González expresó que la falta de igualdad jurídica y sustantiva entre hombres y mujeres es un tema que afecta a todas y todos, ya sea desde el contexto doméstico, el espacio público y hasta las esferas laborales. Los avances que como sociedad se han tenido respecto a la efectiva igualdad de género, han sido lentos.
Precisó que desde la esfera legislativa, se trabaja día a día para que la desigualdad vaya disminuyendo. “Ese es el propósito que nos reúne hoy: el propiciar un espacio de diálogo, coordinación y de construcción de acuerdos entre ámbito local y federal para garantizar derechos de los ciudadanos y promover la transversalidad de la perspectiva de género”.
El diputado David Gerson García Calderón (PRD) argumentó que lograr la igualdad de género requiere de la participación de mujeres y hombres, niñas y de niños, es decir, es responsabilidad de todas y todos. “No hay que pensar igual, pero sí en un mismo objetivo, para trascender y obligar a un cambio ideológico. Se necesitan enfocar los esfuerzos e incluir la perspectiva de género en la educación”.
La historia, dijo, ha dado múltiples ejemplos de discriminación, especialmente hacia las mujeres, cuyo origen se encuentra en estereotipos sexuales y culturales, los cuales han repercutido en la falta de oportunidades y de desarrollo de las mujeres, así como para mantenerlas expuestas y sujetas a la violencia emocional, económica, sexual y física. “Debemos enfocar nuestros esfuerzos para aprovechar al máximo el potencial de cada mujer”.
Karina Padilla Ávila, diputada del PAN, afirmó que existe compromiso con el tema de igualdad. En esta Cámara se tiene un porcentaje muy importante de mujeres, pues son 213 a nivel federal, “pero esa es la lucha de muchas que nos antecedieron y que desde la sociedad civil han impulsado los temas de la población femenina. Hemos sorteado diversos obstáculos, como ser candidatas en distritos perdedores, que fueran suplentes y ponerlas en comisiones de bajo nivel”.
Añadió que hay temas de preocupación, como el derecho de las mujeres indígenas a la propiedad; que cada día mueren siete mujeres; que a nivel de gobierno y en los puesto de mayor rango, las mujeres tienen 17.5 por ciento menor salario respecto a los hombres; que estamos en una tasa de crecimiento del embarazo adolescente donde las jóvenes son las más afectadas y se habla del tema de trata de persona”; por ello, conminó a luchar por la agenda nacional y lograr la igualdad de género.
María de la Paz López Barajas, representante de Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), solicitó a las legisladoras armonizar los ordenamientos jurídicos con perspectiva de género, pues ello contribuirá a cumplir con los estándares internacionales con el propósito de terminar con la vulnerabilidad y discriminación de las mujeres.
