LONDRES, 23 ago (Reuters) – La actividad empresarial de la zona euro se ha mantenido intensa este mes y sólo ha disminuido respecto al ritmo de julio, que fue el más alto de las últimas dos décadas, ya que la rápida campaña de vacunación contra el coronavirus ha permitido que más empresas vuelvan a abrir sus puertas y que los consumidores se aventuren a salir, según una encuesta publicada el lunes.
Si no hubiera habido interrupciones en la cadena de suministro, la actividad podría haberse expandido más rápidamente, pero los temores de que nuevas cepas del coronavirus puedan dar lugar a nuevas restricciones siguieron mermando el optimismo.
El Índice Compuesto de Gestores de Compras de IHS Markit, considerado como una buena guía de la salud económica, cayó a 59,5 en agosto desde los 60,2 del mes pasado. Se situó por encima de la marca de 50 que separa el crecimiento de la contracción, pero justo por debajo de una estimación de Reuters de 59,7.
“La recuperación económica de la zona euro conservó un impresionante impulso en agosto, con el PMI cayendo sólo ligeramente desde los máximos recientes de julio para situar su promedio en el tercer trimestre hasta ahora en el más alto de los últimos 21 años”, dijo Chris Williamson, economista jefe de negocios de IHS Markit.
“Sin embargo, los retrasos en la cadena de suministro siguen causando estragos, dejando a las empresas con frecuencia incapaces de satisfacer la demanda y elevando los costes de las empresas”.
Las empresas aumentaron sus plantillas a un ritmo casi récord, pero siguieron siendo incapaces de completar todos los proyectos nuevos que llegaban, acumulando una acumulación de trabajo al tercer ritmo más rápido de la historia de la encuesta. El índice compuesto de empleo se mantuvo en 56,1.
“El segundo mes de creación de empleo, el más fuerte de los últimos 21 años, refleja los esfuerzos de las empresas por aumentar su capacidad operativa y satisfacer la demanda”, dijo Williamson.
El PMI que cubre la industria de servicios dominante en el bloque bajó a 59,7 desde el máximo de 15 años de julio de 59,8. El sondeo de Reuters había previsto un 59,8.
La demanda sólo se ralentizó ligeramente con respecto a julio, lo que sugiere que el repunte continuará, pero el índice de expectativas empresariales de los servicios, que mide el optimismo sobre el año que viene, cayó a 68,6 desde 69,1.
Los fabricantes volvieron a registrar un mes sólido, ya que su PMI se mantuvo muy por encima de la marca de equilibrio en 61,5, aunque por debajo de los 62,8 de julio y de la estimación de 62,0 de la encuesta. Un índice que mide la producción y que alimenta el PMI compuesto cayó a 59,2 desde 61,1.
Sin embargo, los retrasos en el suministro -el índice de plazos de entrega se situó cerca del mínimo de la encuesta- volvieron a desempeñar un papel fundamental en el aumento de los costes de las materias primas que necesitan las fábricas. El índice de precios de los insumos se situó en 87,3, aunque por debajo del máximo histórico de julio (89,2).
