Inicio Análisis político Alejandro López Munguía En México, la polarización abona a la violencia de la delincuencia organizada.

En México, la polarización abona a la violencia de la delincuencia organizada.

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En México, la polarización abona a la violencia de la delincuencia organizada.

El atentado que sufrió el Jefe de la Policía de la Ciudad de México, Omar García Harfuch, es la evidencia de que en México la violencia está muy lejos de desaparecer. Además de este ataque, Guanajuato se ha cimbrado con el ataque armado de grupos delictivos que se disputan la plaza. Lo mismo en Nuevo León, Jalisco, Michoacán, Veracruz, Quintana Roo, Sinaloa, Tamaulipas, Estado de México, entre otros.

La estrategia de seguridad necesita reforzarse. Pero no con frases jocosas, sino con Unidad Nacional.

Un factor que abona negativamente para debilitar la lucha contra la delincuencia organizada es la polarización. Porque divide y fractura a toda una estructura institucional y lo pone de relieve ante la inclemencia de los delincuentes.

El Presidente Andrés Manuel López Obrador está llamado a conciliar esfuerzos institucionales, convocar a todos los niveles de autoridad para que formar un solo bloque y pacificar al país.

Es necesario detener la polarización. Es menester construir las bases de un esfuerzo más allá de los institucional, que nos levante ante la amenaza de una severa crisis de seguridad.

La violencia que la delincuencia ha generado viene azolando a zonas del país desde hace mucho tiempo. Los cárteles de la droga se han acentuado en regiones del país de tal manera que aunque hubo un cambio de gobierno, las cosas han empeorado.

La política de seguridad del gobierno federal debe centrarse en acciones institucionales que cuenten con el respaldo de todos los gobiernos.

Erradicar la polarización es la clave para fomentar la unidad que tanto necesita el país.

Que cunda el ejemplo, que el respeto entre los poderes sea el eje de la conducta institucional para que el país mejore en lo sustancial. La pendemia, la crisis económica y la polarización, están llevando a México a una paralización institucional, que le facilita las cosas a la delincuencia.

La delincuencia no descansa, tiene sus propios planes, sus propias metas, no le interesa si hay recesión, si hay pobreza, si hay pandemia, aprovecha la división entre autoridades para fortalecer sus posiciones.

El Presidente AMLO debe dejar de polarizar y llamar a la unidad nacional, no importando ideologías, ni apuestas electorales. El país se le puede salir de las manos.