La idea no es nueva y tampoco es producto de la contingencia sanitaria del Covid-19 de la cual se ha insistido la evolución a la transformación digital de los diversos procesos sociales, comerciales, administrativos y políticos. El aprovechamiento de la tecnología de telecomunicación para el trámite de actos de gobierno es producto de un desarrollo que ya tiene alrededor de 20 años atrás.
El término “Gobierno 2.0” nace acuñado por el autor del libro homónimo “Government 2.0” escrito Bill Eggers a mediados del año 2000. A partir de ahí se fue consolidando un modelo a partir de las propuestas de gobierno abierto de Obama y otros líderes de gobiernos occidentales, los cuales se basan en el paradigma del Open Government sustentado en los pilares de: transparencia, participación y colaboración.
No solo se trata de trasladar los trámites de forma presencial a uno en línea, es decir, que por medio de una interfaz que es página web se pueda cumplir con pasos administrativos; sino que implica, una revisión burocrática de los procedimientos para que los ciudadanos cuenten con una herramienta idónea que satisfaga los intereses públicos, con una mayor eficiencia y un ahorro en la carga de recursos físicos y económico que representa el esfuerzo administrativo.
En el sitio Tramitandoenmexico.com puedes consultar cuáles son los trámites gubernamentales que hoy en día están a la disposición de los mexicanos, tanto a nivel federal como estatal. Desde la federación se han simplificado los trámites y los procedimientos que definen lo que se requiere para completar con éxito un acto administrativo, lo que despeja de posibles errores, descuidos u olvidos en cuantos documentos se requiere para la realización de éste.
Uno de los sitios que más han aprovechado este desarrollo tecnológico es el Servicio de Administración Tributaria, o mejor conocido como el SAT, que es la dependencia que tiene como finalidad la tramitación de las contribuciones e impuestos, así como todos los demás procesos de información relacionado con el Registro Federal del Contribuyente y la generación de la e-firma electrónica oficial para la correcta identificación personal en trámites oficiales.
El Registro Federal del Contribuyente o RFC es la clave de identificación fiscal para quienes realizan actividades personales ya sea personas físicas, es decir, individuales, como morales que se relacionan con las empresas u organizaciones de lucro. Es obligatorio no solo para cumplir con los impuestos, sino también, sirve como identificación para otros servicios como las Afores, préstamos de vivienda ya sea en Infonavit o Fovissste, préstamos gubernamentales, aportaciones al Seguro Social.
Hoy en día, precisamente por el control impositivo del SAT y la interrelación tecnológica entre el sector público con las entidades financieras privadas, existe un mayor monitoreo y control de las operaciones bancarias y financiaros, esta transformación digital que viene desde tiempo atrás ha permitido constituir unidades de inteligencia financiera que constantemente está evaluando la licitud de las operaciones monetarias y financieras para detectar los posibles delitos de cuello blanco que tiene que ver con el lavado de dinero, operaciones ilícitas, enriquecimiento ilegal de funcionarios públicos.
Esto no es nuevo, aunque en estos últimos meses, por la contingencia, cada día nos estamos habituando a usar este tipo de herramientas de telecomunicación gubernamental.
