Inicio Análisis político Enrique Vidales Ripoll Información es poder: aprendizaje de Wikileaks

Información es poder: aprendizaje de Wikileaks

469

Sería muy ingenuo suponer que esos documentos sólo pertenecieran al mundo de las películas tipo James Bond. Es muy claro que todos podemos estar conscientes que el intercambio de información entre embajadas con los gobiernos es una realidad. No podría existir ni ser posible el análisis para los decisores en un potencial convenio con otro país ignorar información vital y trascendental para los fines específicos que se persiguen.
La novedad es que ahora su existencia es confirmada, y no solo eso, publicada. Desnudando ese intercambio de información que sólo podría imaginarse en cualquier mente complotista.
Las autoridades de México, como de todos aquellos países que directa o indirectamente están siendo afectados, están preocupadas. Se ha dado a conocer que en poder de WikiLeaks hay más de 2800 documentos confidenciales que podrían poner en descubierto los secretos de gobierno, sobretodo los que se refieren a la lucha contra la delincuencia organizada.
¿Es conveniente que los ciudadanos tengamos conocimiento del contenido de esos documentos?
Indudablemente hay dos visiones al contestar esa pregunta, que dependen de la posición por donde se vea y analice la situación.
Como ciudadano es importante saber lo que sucede en el seno del gobierno. Las condiciones e implicaciones que tiene esas decisiones para la misma seguridad y acciones de gobierno. Pero por otro lado, se le coarta campo de acción a los gobiernos al ser expuestos ante el ojo del ciudadano universal.
Seamos claros que tomar decisiones no es sencillo, que implica muchas veces sopesar la realidad con el análisis de los beneficios y los riesgos de cada alternativa de solución. No creo que algún presidente no utilice información privilegiada al momento de hablar con un colega de otro país. Un absurdo es caer en la ingenuidad e inocencia.
Por ello nadie puede sentirse ofendido. Al fin y al cabo, cualquier gobierno que tiene que tomar decisiones, la información termina siendo poder. No en vano existen reglas – que ahora resultaron ultrajadas – que regulan como debe llevarse a cabo el intercambio.