Inicio Noticias Internacional Los precios subieron en Japón un 2,2 % en junio, su mayor...

Los precios subieron en Japón un 2,2 % en junio, su mayor alza en 7 años

266

Tokio, 22 jul (EFE).- El índice de precios al consumo (IPC) de Japón subió un 2,2 % interanual en junio, su décimo mes consecutivo de alza y su mayor ritmo de crecimiento en siete años, impulsado de nuevo por el encarecimiento energético.

El indicador, que excluye los precios de los alimentos frescos por su alta volatilidad, aumentó una décima con respecto a mayo, según los datos publicados este viernes por el Ministerio del Interior.

La subida de junio se produce tras un alza del 2,1 % interanual en mayo y supera por tercer mes consecutivo la meta inflacionaria del 2 % del Banco de Japón (BoJ), impulsado también por el acentuado encarecimiento de la energía y las materias primas.

El alza de junio es el mayor ritmo de crecimiento del IPC japonés desde marzo de 2015, cuando los precios subieron otro 2,2 %.

La subida de los precios energéticos, del 16,5 % interanual, fue el factor que más contribuyó al encarecimiento del IPC en el sexto mes de 2022, mientras que el coste de la electricidad, el gas y otros combustibles se encareció un 14 % respecto al año previo.

En concreto, el precio de la electricidad subió el mes pasado un 18 %, el del gas un 17,1 % y el de otros combustibles, un 23,4 %.

El banco central japonés puso en marcha en 2013 un amplio programa de ultraflexibilización monetaria para situar la inflación en el 2 %, aunque este objetivo se fue retrasado sucesivamente.

La subida de junio está en línea con las previsiones del BoJ para el presente ejercicio de 2022 (que concluirá el 31 de marzo de 2024), período en el que espera que la inflación crezca un 2,3 % con respecto al año previo, debido principalmente “al incremento de los costes de la energía, la alimentación y los bienes duraderos”.

La guerra ruso-ucraniana ha provocado un encarecimiento de las importaciones de energía y otros materiales y la pandemia de covid-19 sigue causando estragos en las cadenas de suministro.

Pese a la tendencia al alza de los precios y en un movimiento esperado, la entidad crediticia japonesa optó en la víspera por volver a mantener inalterada sus medidas de ultraflexibilización, basadas en tipos de interés a corto plazo del -0,1 % y un cuantioso programa de compras de fondos cotizados para mantener la curva de rendimiento del bono a largo plazo en torno al 0 %.