Mauricio Vila el encantador de Rolando.
El hoy Gobernador del Estado siempre contó con la aprobación de su antecesor, Rolando Zapata Bello. En la historia que da sustento a la victoria del panista, queda registrado el papel que jugó el priísta.
El despunte del joven panista se dio en pleno apogeo de Rolando Zapata Bello. Mientras el priísta gobernaba, el panista calentaba en el Congreso. Sin ser ambientalista le dieron la Presidencia de la Comisión del Medio Ambiente, por consentimiento del Jefe Político del Estado, o sea, Rolando. Corría el primer año del priísta como mandatario estatal.
Mauricio nunca dio problemas. Al contrario, fue un político jovial, cordial y atento. Su perfil se fue adecuando a cada día que transcurría el incipiente sexenio.
La candidatura a la Alcaldía de Mérida fue de ensueño. La aparición del video mostrando al puntero Raúl Paz en fiesta con Montana fue importante. A partir de allí el panorama se empezó a ver más claro.
Al ganar la Alcaldía, Mauricio Vila no solo obtuvo el cargo, sino que eliminó a uno de los peligros para Rolando: Nerio Torres Arcila. Analizados los elementos, los hechos, los acontecimientos, se llega a la conclusión que Nerio siempre estuvo destinado a ser destruido políticamente hablando.
Mientras esto sucedía, Mauricio fue conquistando voluntades. Es ganó la simpatía de los poderes políticos, económicos, sociales y mediáticos.
¿Cómo evitar pensar en la complicidad de Rolando, cuando ejerció un poder cuasi absoluto?. “No se mueve una hoja del árbol si el Señor Gobernador no lo dispone”, reza la máxima política del poder político.
“Vila es el candidato de Rolando”, esta frase se hizo común y frecuente. Se asoció con la voluntad del mandatario que mientras fortalecía su relación con el Alcalde, destruía las condiciones internas del PRI para alcanzar la unidad en torno al candidato.
Rolando se encargó de ayudar a Vila en todo momento. Parecía cuidarlo, proveerlo, hasta conducirlo. En los eventos oficiales Vila parecía a estrella a seguir. Evidencia de ello abunda en la hemeroteca virtual de Mi Punto de Vista y de muchos medios y en redes sociales.
Mauricio Vila tuvo el acierto de no desaprovechar la oportunidad. Se enfocó, hizo la tarea, se aplicó y se consolidó a tiempo.
Sus atributos y talentos le permitieron apuntalarse como el sucesor. Rolando siempre lo vio complacido.
La política es un entramado de intereses. Vila denunció a la administración de Rolando, sin embargo, nada está pasando. La corrupción en cualquier momento puede ser castigada.
Lo cierto es que a un año de la derrota del PRI, evidentemente hay que resaltar que para Rolando, el candidato viable siempre fue Mauricio, pero no Sahui.
