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Profanan altar con video sexual y juez solo les impone “medidas correctivas”

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A pesar de tratarse de una profanación que hirió los sentimientos religiosos de la comunidad católica, la justicia de Bélgica solo impuso medidas correctivas a la pareja que tuvo relaciones sexuales el altar de la iglesia Sint-Michielskerk, en la ciudad de Bree, y cuya acción, grabada en video, fue difundida en las redes sociales.

La semana pasada, la policía local abrió una investigación sobre un video sexual que mostraba a un hombre y una mujer teniendo sexo en el altar y que empezó a circular en las redes sociales.

No está claro cuándo se realizó la profanación, pero miembros de la iglesia creen que pudo haber sucedido el 27 de octubre, los informes locales sugieren que el video comenzó a distribuirse a través de WhatsApp antes de difundirse en los canales de redes sociales la semana pasada.

El miércoles 4 de noviembre la policía elaboró un doble informe: tanto por indecencia pública como por distribución de material pornográfico.

Según informes de medios locales, la pareja del video fue identificada e interrogada por la policía. Ambos sospechosos admitieron los hechos y fueron llevados ante un juez.

El juez los declaró culpables pero solo les impuso medidas correctivas: tienen la obligación de seguir un curso de formación que les haga “reflexionar sobre sus acciones y su impacto”.

Si rechazan seguir la formación, los autores del vídeo se expondrían a acciones penales.

El juez también determinó que se inicie un proceso de mediación penal, en el que se pone en contacto a los autores y las víctimas, en este caso las autoridades eclesiales, para llegar a un acuerdo.

Según el medio local The Brussels Times, durante el pasado fin de semana, por sugerencia de los feligreses y de la Diócesis de Hasselt, se pronunció “una oración y se roció el altar con agua bendita para restaurar el verdadero propósito del edificio de la iglesia”.

“El significado del edificio de la iglesia y el altar se vio afectado. El lugar de honor a Dios fue profanado. Mucha gente está impactada”, dijo el deán Jaak Janssen en la radio local el domingo .