“No hay garantía de respeto e imparcialidad” asegura el Revolucionario Institucional asestando un golpe duro a ese grupo de “ciudadanos” que presume de ser demócratas para ejercer su derecho de libertad de expresión bajo el esquema “peguémosle, mordámosle, jalémosle” a Ivonne Ortega y su equipo de trabajo.
Si bien es cierto la libertad de expresión es un derecho inalienable de todo mexicano, lo es también que del otro lado también hay derechos a no ser agredido de manera impune, grosera y manipuladamente.
Todos los integrantes de ese equipo tienen un pasado y un presente ligados al PAN, todos, ninguno está excento.
Luego entonces, el PRI optó por hacerse a un lado, las críticas vendrán, pero el golpe ya está dado.
El PRI considera que ese grupo (incluido el Diario) está identificado con el PAN y por ende manipularán según la apreciación del PRI las respuestas a favor del blanquiazul.
Sería tanto como pedirle al PAN que se sujetara a los cuestionamientos del Por Esto o de algún panfleto declarado como panista en el facebook dirigido por un “loquito”.