No hay duda alguna que un vehículo para cualquier individuo o persona constituye no solamente un medio para la movilidad ante el crecimiento de las ciudades y la necesidad de desplazamiento, sino que también constituye un elemento que conforma el patrimonio; por lo cual, la seguridad sobre la propiedad y el estatus legal de una unidad automotora es un elemento de certidumbre y certeza.

Uno de los delitos muy frecuentes es el robo vehicular. De acuerdo con la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS) al año se pueden reportar más de 92 mil robos de autos, ya sea con violencia o engaño de unidades que entran el mercado para ser vendidas por partes, suplantando unidades para otros fines delictivos y otras más para ser puestas a la venta.

Muchos conocemos casos, por experiencia personal, familiares o conocidos, de amargas experiencias en el robo de un vehículo, como también el problema que representa la adquisición de alguna unidad reportada como robada.

¿Cómo podemos darle certidumbre a nuestra propiedad o en su caso de una transacción de compra-venta o adquisición de un vehículo para evitar daños a nuestro patrimonio?

Importancia de los registros públicos

Uno de los instrumentos legales que nos ayuda son los registros públicos. Un registro público es una institución establecida con fines de dar publicidad formal a determinados hechos, circunstancias o derechos, como en este caso hablamos de la propiedad o estatus legal de un auto.

Hay muchos tipos de registro, de viviendas, comercios, empresas, patentes. En nuestro caso, tratándose de la propiedad vehicular se cuenta con el REPUVE.

¿Qué es el REPUVE?

Al realizar una consulta al REPUVE se puede conocer circunstancias especiales para una unidad si tiene o no reporte de robado o de recuperado de placa que implica que, aunque no tiene la condición de robado el vehículo, en algún momento previo lo había estado. Por lo cual podemos investigar más sobre el origen y el estatus legal de la unidad para evitar problemas más serios después de su adquisición.

Como cualquier otro registro público, es necesario darle de alta a nuestra unidad automotriz. Los facturados desde el 4 de marzo de 2008 hasta hoy la responsabilidad de inscribirlo es el fabricante, ensamblador o importador ante las oficinas de control vehicular conforme a los procesos de seguimiento y control que cada legislación estatal determina se debe cumplir. Es por ello de que, si al consultar el estatus de nuestro vehículo no aparece en el REPUVE, se debe ir al concesionario donde se compró la unidad para que se pueda dar de alta en el sistema. Este trámite es gratuito y constituye un esfuerzo gubernamental para dotar a la ciudadanía de un instrumento de certidumbre legal sobre el estatus de un automóvil.

Con esto se posibilita la comprobación del estatus legal, la posibilidad de una investigación tanto por el ciudadano para una buena adquisición de un nuevo vehículo para su uso, así como también, es un banco de datos para que las autoridades rastreen unidades robadas en otras entidades. Es muy bien sabido, que la tendencia criminal es posicionar en un mercado ajeno al estado de origen la venta una unidad robada.

Así que si quieres proteger la propiedad de tu vehículo, acude al REPUVE y verifica su alta o el estatus legal que tu unidad tiene.