En Yucatán, PAN y coalición PVEM- PT- Morena se disputan las Diputaciones Federales.
En el inicio de la contienda electoral, el PAN y la coalición Juntos Hacemos Historia se disputan las diputaciones federales en juego.
En el distrito 1, Liborio Vidal parece no tener problema alguno, su red de operadores está intacta, y su estructura territorial sigue en operación como en los viejos tiempos. En esta ocasión juega con los colores de Acción Nacional, y cuenta con todo el respaldo del gobierno de Mauricio Vila Dosal.
El PRI postuló a Sánson Palma, como una cuota de los alcaldes, pero su alcance político y su fuerza electoral no compite con la Liborio. Además de que los negativos del PRI en el interior del estado son muy altos. Morena por su parte postuló a un candidato que despierta incertidumbre total.
En el distrito 2, Mario Peraza parece ser el “caballo negro” de la contienda. Encabeza la Coalición Juntos Hacemos Historia, lo que lo colocó en las preferencias electorales como el preferido de la gente. El PRI está basando su estrategia en la distribución de apoyos obsoletos como despensas, vales de gasolina, y hasta dinero lo que además de que no le garantiza el voto mayoritario de la gente, genera rechazo, al ser considerado una práctica del priísmo corrupto.
En el distrito 3, la lucha parece estar entre Oscar Brito de Morena y Rommel Pacheco que parece estar generando buenas simpatías entre la población abierta. Oscar es un joven que representa genuinamente a la 4T, un militante digno del partido que creó el presidente López Obrador. Pablo Gamboa del PRI luchará francamente por dar la batalla, aunque la situación no es 100% favorable. Los negativos del PRI son muchos y el rechazo de la población abierta es auténtico. El pronóstico es reservado, aunque la balanza en este momento está para Morena. Pablo de todos modos será diputado federal, pues además de ser candidato por mayoría relativa lo es por la vía plurinominal, en un lugar seguro.
En el distrito 4, la ventaja la lleva Cecilia Patrón Laviada del PAN. Mujer de retos, con un carisma inigualable, su trabajo territorial es poderoso y tiene la maquinaria electoral “aceitadita”. El PRI presentó a una empresaria muy famosa, muy priísta pero “desencanchada”, sin arraigo entre la gente de abajo y sin militancia activa. En el distrito el rechazo hacia el PRI es grande debido a sus negativos de gran corrupción. Morena no tiene nada que hacer en esta demarcación. La ventaja es claramente para el PAN con Cecilia.
En el distrito 5, la ventaja la lleva la Coalición Juntos Hacemos Historia, con Carmen Navarrete Navarro a la cabeza. Su gran arraigo la coloca como la virtual ganadora de un distrito que habitualmente ganaba el PRI. Carmen cuenta con un arraigo legítimo y poderoso, resultado de que surge de las bases sociales. El PRI postuló a Janice Escobedo, actual diputada estatal cuyo desempeño dejó muy mal sabor de boca entre la población. El PAN en esa demarcación no presenta amenaza por el momento.
En las diputaciones federales varios factores estarán en juego:
El rechazo hacia el PRI por sus graves negativos.
El hecho que el PRI enfrentará a priístas como candidatos de otros partidos políticos.
La influencia del gobierno federal, a través de los programas de apoyo a los grupos de población vulnerable.
