Ante los retos que vivimos en esta nueva relación con Estados Unidos, es momento de abandonar la mezquindad y el egoísmo para crear un pacto a favor de los migrantes, indicaron los autores del libro “La concertación política en contextos de democracias fragmentadas: el caso Pacto por México”.
En la presentación de la obra, el coordinador parlamentario del PRI, diputado César Camacho, dijo que el Pacto por México “es una muestra del sentido de responsabilidad de todos sus suscriptores; es una expresión rotunda de que la política puede triunfar”.
El legislador señaló que “el pacto, el cual recibió aplausos y críticas, fue la incubadora de acuerdos sustanciales y el preludio de otros, porque los partidos suscriptores no sólo no querían, sino no podían sustituir a diputados, senadores y legislaturas locales”. En consecuencia, enfatizó, “de lo que se trataba era de tener un ejercicio de aproximación, y se tuvo”.
Las reformas que resultaron de ese acuerdo político nacional, continuó, van en ruta; sin embargo, “ni éstas ni ninguna otra modificación al marco normativo tiene efectos milagrosos, es decir, no se cambia la realidad por ensalmo”. Lo que se hace es entregar a las autoridades competentes y a la comunidad instrumentos más eficaces, puntualizó.
Afirmó que el Pacto por México es una actitud generosa que, “en política, hace falta; se trató de una actitud de dar y de contribuir, con sentido de responsabilidad”.
Juan Carlos Amador Hernández, el coautor de la obra y director general de Difusión y Publicaciones del Instituto Belisario Domínguez del Senado de la República, precisó que el Pacto por México implicó reconocer que los cambios logrados después de 30 años de transición democrática eran insuficientes; aludía la insolvencia de las fuerzas políticas, pero también de las instituciones del Estado para procesar los problemas nacionales, acotó.
Por ello, enfatizó, no descartamos que uno de los significados posibles del mismo haya sido la aceptación de los partidos sobre su respectiva responsabilidad de la situación del país y, por tanto, de la necesidad de acordar democráticamente su solución.
“Es claro que de no haber aceptado su responsabilidad no se hubieran sentado a la mesa del diálogo con tan buena disposición y con la plena conciencia de que por sí solos no se lograría lo mismo, a pesar de alternancias”, afirmó.
Expresó que era evidente cambiar el andamiaje constitucional y revitalizar los cauces democráticos de la política poniendo en marcha reformas, pero faltaba por determinar la vía del cambio, de las complicaciones para concretar acuerdos mediante vías institucionales tradicionales.
La obra, comentó, aborda un hecho del pasado reciente del país, en un contexto de importantes retos que nos exigen reforzar nuestros vínculos de identidad. El Pacto por México, hoy, es una experiencia que nos sirve como ejemplo para la construcción de acuerdos políticos y sociales, que nos hagan un país más unido para los retos que tenemos por delante, subrayó.
En su turno, coautor del libro, Francisco Guerrero Aguirre, resaltó que es crucial un Pacto por México a favor de nuestros hermanos migrantes, sobre todo en este momento de zozobra. “Creo que todos los partidos políticos y aquellos que aspiran a la toma decisiones, le deben a los migrantes un gran acuerdo nacional, un gran pacto a su favor”.
Detalló que el Pacto por México demostró que es posible dialogar en asuntos importantes para el país y, “en este momento, no hay nada más importante que darle la mano a quienes enfrentan una situación compleja”, expresó.
Ante ello, explicó, el Pacto por México nos da un ejemplo claro de que cuando se quiere, se puede tener un diálogo político de altura. “Se presenta como una lección histórica y un referente inmediato de nuestro enorme potencial para construir, juntos, los desafíos que se vislumbran para nuestro país. Tenemos las herramientas para superarlos”.
Bajo este tenor, continuó, México tiene, en su capacidad para generar acuerdos, una de sus fortalezas más grandes para defender los derechos de los mexicanos. “Hoy podemos generar una agenda compartida con otras naciones para hacer valer los intereses nacionales”, detalló.
Guerrero Aguirre explicó que la obra no pretende hacer una evaluación de las reformas, sus alcances o resultados, sino identificar las teorías, procesos y experiencias internacionales y antecedentes históricos, entre otros elementos, que ayuden a comprender el Pacto por México como instrumento de gobernabilidad en un sistema democrático.
“El libro surge de la necesidad de comprender y explicar el mecanismo político que logró romper con las inercias de confrontación que hacían difícil formular soluciones de largo plazo a los problemas estructurales del país”, acotó.
Más allá de sus 95 compromisos, agregó, el Pacto por México, desde su firma el 2 de diciembre de 2012 y hasta el 28 de noviembre de 2013, significó una plataforma mínima de diálogo e interlocución en un país donde lo común era la descalificación. De esta manera, confirmó, “este convenio se convirtió en un catalizador de la política, el diálogo y los acuerdos en las Cámaras”.
La obra, que contempla cuatro capítulos, se podrá adquirir vía electrónica en la página oficial de la Cámara de Diputados.
