México, 23 Dic (Notimex).- El Festival Internacional de Cine UNAM apostó por la creación de un nuevo público y por la difusión de la cultura cinematográfica durante su octava edición a la que asistieron más de 16 mil espectadores.
Del 28 de febrero al 6 de marzo, se exhibieron 99 películas nacionales e internacionales, con 168 proyecciones en ocho sedes universitarias y en 14 sedes alternas; también se programaron cuatro funciones al aire libre a las que asistieron mil 425 cinéfilos.
Entre sus actividades se presentaron tres retrospectivas: la dedicada al artista multidisciplinario israelí Roee Rosen, que, en el cruce del video, la pintura y la producción editorial, se ha situado como la voz más crítica del presente de su país.
Así como la destinada al trabajo del japonés Nobuhiro Suwa, quien consigue articular un universo artístico a través de la inmersión contemplativa en las relaciones humanas, al exhibir una poética de conexiones profundas con la Nueva Ola francesa.
Así como la del estadunidense Travis Wilkerson, que con su cine político de profundo sentido crítico, ha sido reconocido por algunos como la conciencia política del cine independiente norteamericano en el siglo XX.
En la sección Clásicos Restaurados, cuya restauración y rescate son imprescindibles para sustentar la memoria cinematográfica y preservar la historia mundial, se presentaron “La Momia” (“The Mummy: the Night of Counting the Years”), del realizador egipcio Shadi Abdel Salam, rescatada por la Cineteca de Bolonia, y “Trásos-montes” de António Reis.
En la sección Archivo, dedicado a las joyas del cine nacional resguardadas por la Filmoteca de la UNAM, se proyectaron “El despojo” de Antonio Reynoso 1958-60; “La magia” de René Rebetez 1971-72; “La sunamita” (segmento de Amor, amor, amor) de Héctor Mendoza 1965, y “Rulfo aeternum” de Rafael Corkidi. 1991.
En colaboración con la Cátedra Ingmar Bergman en Cine y Teatro, se impartieron cinco clases magistrales a cargo de los cineastas Lucrecia Martel (Argentina), Travis Wilkerson (EUA), Nobuhiro Suwa (Japón), Roee Rosen (Israel) y Lav Diaz (Filipinas).
El Foro de la Crítica Permanente fue sede de ocho mesas en las que se abordaron temas como “El sonido y las letras”, con Lucrecia Martel y Kent Jones; y “El cineasta y los sonidos” con Samuel Larson Guerra y Manuel Asin.
Con la Secretaría Técnica de Planeación y Programación de la Coordinación de Difusión Cultural, se organizó el programa “Síntesis: Interconexiones entre Cine y Arte Contemporáneo”, encuentro que tuvo como fin promover un nuevo foro de discusión estética, así como una agenda de trabajo sobre nuevas maneras de entender y colaborar en estas dimensiones artísticas acordes a las circunstancias actuales.
El 6 de marzo se llevó a cabo la ceremonia de clausura y premiación en el Antiguo Colegio de San Ildefonso y a la par se ofreció una función al aire libre con la película “Las buenas maneras” (“Good Manners”) de Juliana Rojas y Marco Dutra, Brasil-Francia, 2017, en la Plaza Seminario del Centro Histórico de la Ciudad de México.
En la Competencia Internacional los ganadores de los premios Puma a Mejor Película, “El sabor del cemento” (“Taste of Cement”) de Ziad Kalthoum; a Mejor Director, Valérie Massadian, por su película “Milla”, (2017), mientras que el Premio del Público fue para “El sabor del cemento” de Ziad Kalthoum.
En la categoría Competencia Mexicana, el galardón a Mejor Película fue para “Los débiles” de Eduardo Giralt y Raúl Rico (2018); la Mención Puma México fue para Juan Manuel Sepúlveda, por “La vida suspendida” de Harley Prosper (2018).
El Premio TV UNAM se otorgó a “David. El regreso a la tierra de Anaïs Huerta” (2017); el Premio LCI Seguros lo recibió “El reino de la sirena” de Luis Rincón (2017); el LCI Seguros–Mención Especial lo recibieron Eugenia y Bruno Varela por “Mano de Metate” (2018).
En la categoría Aciertos. Encuentro Internacional de Escuelas de Cine, el Premio Aciertos al Mejor Cortometraje fue para “Heroísmo”, (2016) de Helena Estrela Vasconcelos, alumna de la Escuela Superior de Teatro e Cinema.
