Tokio, 10 jul (EFE).- Las lluvias récord que están azotando el sudoeste de Japón desde este fin de semana llevaron a las autoridades a emitir la máxima alerta meteorológica y han dejado al menos una decena de desaparecidos y un muerto, según el último balance ofrecido por las autoridades.
El frente meteorológico ha causado extensas inundaciones, desbordes de ríos y deslizamientos de tierra en diversas localidades del sudoeste del país, especialmente en las prefecturas de Saga y Fukuoka, las más castigadas en las últimas horas.
Las autoridades nacionales decidieron activar en la mañana de este lunes la alerta meteorológica especial ante catástrofes de este tipo, aunque posteriormente durante la jornada rebajó el nivel de advertencia al evolucionar el frente hacia el este, y mientras continúan las tareas de búsqueda y rescate de víctimas de inundaciones y corrimientos de tierra.
El portavoz del Ejecutivo japonés, Hirokazu Matsuno, señaló que por el momento se ha confirmado un fallecido, dos heridos leves y otras dos personas desaparecidas, mientras que los medios locales hablan de una decena de personas en paradero desconocido.
Matsuno también mencionó en rueda de prensa que numerosas viviendas han quedado inundadas y que el desborde de varios ríos ha causado otros daños en infraestructuras que aún están siendo evaluados por las autoridades.
El temporal ha dejado interrupciones notables en la red de transporte, entre las que destaca la cancelación de 25 vuelos domésticos, el corte de 33 puntos en autopistas y la suspensión de 32 conexiones ferroviarias.
Más de 1.800 viviendas se quedaron sin luz en el oeste de Japón a raíz de las lluvias torrenciales y las inundaciones, que también provocaron cortes del servicio de agua y de las redes de telecomunicaciones en algunos puntos.
Uno de los incidentes más aparatosos tuvo lugar en la ciudad de Kurume, en la prefectura de Fukuoka, donde siete hogares quedaron atrapados por un deslizamiento de tierra que se produjo al desbordarse un río cercano y que según las autoridades locales, habría afectado a unas 20 personas, de las cuales la mayoría fueron rescatadas y 5 continúan desaparecidas.
En la ciudad de Karatsu, en la prefectura de Saga, un corrimiento de tierra ha dejado tres desaparecidos después de que sus casas quedaran sepultadas por la arena y escombros, mientras que la defunción de otra mujer de unos 70 años fue confirmada en esta ciudad tras quedar atrapada junto a su marido.
En la ciudad de Hofu, en la prefectura de Yamaguchi, cerca de un centenar de personas quedaron aisladas hoy al bloquear la tierra una carretera local, sin dejar ningún herido.
Varias zonas del sudoeste del país han registrado niveles de precipitaciones que no se habían visto en varias décadas, y que en el caso de la prefectura de Fukuoka, llevaron a las autoridades locales a solicitar la asistencia de las Fuerzas de Autodefensa (Ejército) de Japón.
Las lluvias acumuladas superan los 300 milímetros en seis horas en las localidades más afectadas.
A las 17 horas locales (8:00 GMT), seguían vigentes las órdenes o recomendaciones de evacuación emitidas por autoridades locales que afectaban a unos 1,93 millones de personas en las prefecturas de Yamaguchi, Fukuoka, Saga y Oita, las más castigadas por las lluvias.
Este frente lluvioso que viene afectando a la mitad sur del archipiélago nipón dejó también estragos especialmente significativos en la prefectura de Shimane durante el fin de semana, donde se registraron 20 desbordes de ríos y 15 incidentes de corrimientos de tierra.
Las “alertas especiales” de lluvia como las activadas hoy en el país asiático se emplean cuando el riesgo de que se produzcan accidentes derivados de las mismas es “extremadamente alto”, según la Agencia Meteorológica de Japón.
Un oficial de este organismo advirtió hoy de que durante las próximas horas continuará el riesgo de precipitaciones intensas que pueden causar inundaciones y desplazamientos de tierra en zonas del sur, el este y el centro del archipiélago nipón.
