Seúl, 19 jul (EFE).- El presidente surcoreano, Moon Jae-in, ha rechazado celebrar esta semana una cumbre con el primer ministro nipón, Yoshihide Suga, y acudir a la inauguración de Tokio 2020 debido al entendimiento “insuficiente” entre ambos vecinos, informó hoy su oficina.
La oficina presidencial surcoreana realizó el anuncio horas después de que el principal diario nipón, el Yomiuri, asegurara que ambas partes habían acordado que Moon asistiría a la inauguración de los JJOO este próximo viernes y que ese mismo día ambos mandatarios celebrarían la que habría sido su primera cumbre bilateral.
El portavoz de la oficina presidencial, Park Soo-hyun, afirmó en un comunicado que Seúl y Tokio han “mantenido conversaciones significativas sobre cómo progresar con respecto a asuntos históricos y a cooperación futura”.
El diálogo se ha desarrollado en una “atmósfera agradable, y aunque se ha alcanzado un entendimiento considerable, ha seguido resultando insuficiente” para acordar una cumbre.
Desde 2018, Tokio ha protestado varias sentencias de tribunales surcoreanos en favor de coreanos que fueron esclavizados por empresas niponas durante el periodo de colonización de la península (1910-1945).
En respuesta, el Gobierno nipón castigó a Seúl con restricciones en materia de exportaciones que fueron respondidas con medidas recíprocas por parte surcoreana y han dejado la relación bilateral en su peor momento en varias décadas.
Moon logró mantener un par de cumbres con el predecesor de Suga en el cargo, Shinzo Abe, aunque siempre fueron en el marco de otros encuentros multilaterales, como la Asamblea General de la ONU o la cumbre a tres bandas entre Seúl, Tokio y Pekín.
De momento Moon y Suga, que llegó al poder el pasado septiembre, no han celebrado aún ningún encuentro, y ambas partes optaron por no celebrar una reunión en el marco de la última cumbre de líderes del G-7 en junio, a la que Corea del Sur fue como invitado.
Al mal momento de la relación bilateral se suma la opinión negativa de muchos surcoreanos en las encuestas con respecto a la celebración de una cumbre y un reciente episodio que ha empañado aún más la situación protagonizado por el número dos de la embajada nipona en Corea del Sur, Hirohisa Soma.
Un medio surcoreano que se reunió recientemente con Soma afirmó que el diplomático dijo que Seúl está requiriendo más atención de la que Tokio ahora mismo está dispuesto a darle y que por ello la actual política de Moon equivale a “masturbarse”.
