En la clínica de medicina familiar del Issste, Lindavista, de la Ciudad de Mérida existe un grave desabasto de medicamentos que tiene a la derechohabiencia prácticamente de rodillas.
Pacientes de la tercera edad en especial y gente con padecimientos que se controlan con medicamentos que se recetan para atender enfermedades de grave riesgo, son los que más padecen esta situación de desabasto.
La falta de medicamentos se ha prolongado por más de 6 meses, periodo durante el cual, la derechohabiencia ha tenido que adquirir con sus propios recursos las medicinas, pues existe una falta de cumplimiento en la dotación.
La situación es de extrema angustia pues el paciente recibe la receta de su médico familiar y al presentarse en la farmacia, le informan que sus medicamentos no los tienen en existencia, por lo que le indican que en un lapso de un mes regrese. Lo dramático es que al regresar al mes, por lo general les vuelven a decir que el medicamento no ha llegado o bien que llegó y en un día se agotó.
Existen pacientes que acuden cada mes por sus medicamentos y que han acumulado sus recetas mes a mes. Los pacientes de la tercera edad por ejemplo, acuden por medicamentos de enfermedades controladas, como la presión arterial, la diabetes, insuficiencia renal, artritis, migraña, entre otras. No importa su condición, la respuesta es siempre la misma.
Si a esto se acumula que desde la Coordinación Médica no se atiende con esmero a los pacientes esto agrava las cosas. Muchos pacientes llegan un poco retrasados a su consulta debido a su enfermedad o bien porque siendo personas de edad avanzada no tienen cómo trasladarse o no les ayudaron sus familiares a tiempo, llegan retrasados a su cita y él Coordinador les niega la atención.
Las citas médicas para variar casi siempre nunca son inmediatas, en especial cuando se trata de atención con médicos especialistas. Esta situación se va agravar, toda vez que se incrementó la base de la derechohabiencia en 3 mil pacientes debido al traslado de la Semarnat a la entidad, cuya base laboral federal alcanza esa cifra.
Los medicamentos que más demandan tienen y que están en desabasto constante entre otras son:
Fluoxetina
Etirocoxib
Linagliptina
Insulina Glargina
Omeprazol
Lozartan
Eritoproyectina
La mala planeación de la adquisición de medicamentos ha sido una constante en la Clínica de Medicina Familiar que con el tiempo ha venido a menos por culpa de funcionarios que rayan en la incompetencia con su negligencia. Eso sí, los derechohabientes no dejan de pagar puntualmente sus cuotas por servicio médico.
