Todos debemos ser iguales ante la Ley: Ivonne Ortega

“Todos debemos ser iguales ante la Ley”, esta frase define con precisión la visión de Ivonne Ortega, Diputada Federal y ex Gobernadora de Yucatán, que votó a favor del derecho a contraer matrimonio civil que tienen las personas del mismo sexo.

“Soy católica y respeto a mi Iglesia pero también soy mexicana y respeto la Constitución y las leyes. En nuestro país, la separación entre los temas del Estado y los del culto existe desde los tiempos de la Reforma, pero la convivencia del cumplimiento de la ley y la fe existe y se sustenta en una frase muy clara: Dad al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios”.

Ivonne Ortega Pacheco dio muestra ayer de su compromiso con México, al votar a favor de la iniciativa presentada por el Presidente Enrique Peña Nieto, que propiciaba el reconocimiento a nivel constitucional del matrimonio igualitario.

Ortega Pacheco mostró un gran oficio político, pues refrendó las bases que consolidan el estado de derecho de la nación. Por encima de los intereses de la Iglesia o de cualquier interés particular, están los intereses constitucionales establecidos en la Carta Magna.

Todo mexicano sabe que México se fundamenta en su Constitución, misma que establece que todo ser humano tiene derechos, y que al respetarlos, se garantiza la vida constitucional del país. Nada seríamos sin nuestra Carta Magna.

Por eso, la decisión de Ivonne Ortega resalta sobre todo lo demás. Porque se trata de hacer valer el Estado de Derecho en México. Valiente decisión la de Ivonne Ortega por defender los derechos de aquellos que siendo minoría, son importantes para la nación.

En su intervención en el Congreso, Ivonne Ortega dejó clara su posición, aquí lo que dijo:

“El matrimonio civil igualitario es una expresión de la igualdad ante la ley, establecida por la Constitución Mexicana. Es un tema de derechos y no de prácticas religiosas, y por cierto la libertad de culto también está protegida en nuestra Constitución”.

“En México no puede haber mexicanos de primera y de segunda, sino iguales ante la ley, y ésta es la razón de mi voto a favor del dictamen”, subrayó.

“Pero también es cierto que para ejercer ese derecho es necesario recorrer un camino tortuoso y en muchos casos ampararse. Tienen que superar obstáculos que lo convierten, para efectos prácticos, en un derecho vedado”.

“Desde que el Presidente Enrique Peña Nieto envió la iniciativa que ha generado el dictamen, como todos saben, me manifesté a favor porque creo en la igualdad de derechos y estoy en contra de cualquier acto de discriminación”.

En cuanto a las creencias religiosas, recordó que el representante del Papa en nuestro país, el Nuncio Apostólico, “ha expresado que se trata de un asunto de derechos humanos”.

“Soy católica y respeto a mi Iglesia pero también soy mexicana y respeto la Constitución y las leyes. En nuestro país, la separación entre los temas del Estado y los del culto existe desde los tiempos de la Reforma, pero la convivencia del cumplimiento de la ley y la fe existe y se sustenta en una frase muy clara: Dad al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios”, concluyó.

Durante la sesión plenaria de la Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados, la mayoría de sus integrantes votó en contra, por lo que el dictamen fue rechazado. Los únicos votos priistas a favor fueron los de Ortega Pacheco y el diputado Benjamín Medrano.