Inicio Análisis político Alejandro López Munguía A donde llega a gobernar Morena, entra el Narco: Rolando Zapata

A donde llega a gobernar Morena, entra el Narco: Rolando Zapata

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El candidato a senador por Yucatán de la coalición Fuerza y Corazón por México, Rolando Zapata Bello, no se anduvo por las ramas y soltó una declaración bomba, que nada tiene que ver con lo chusco de la típica y regional “bomba yucateca”.

Esta declaración tan directa, impacta de lleno en el ánimo de los yucatecos, pues en su calidad de ex gobernador constitucional del estado sabe de lo que habla.

Y es que, la seguridad que vive el estado, es genuina y coloca a Yucatán como una entidad segura para las familias de todos los yucatecos y de quienes deciden radicar en la entidad.

La fuerte declaración del ex mandatario priísta contrasta con la floja postura del candidato a gobernador de Morena, Huacho Díaz Mena, quien sobre el tema de la seguridad pública ha sufrido traspiés, luego de la confusión que se creó por la felicitación que hizo la candidata presidencial de una colaboradora suya de origen yucateca, a la que felicitó por su trabajo en la materia en el gobierno de la Ciudad de México.

El ex gobernador del estado de Yucatán ha asumido el rol del líder de un PRI que se aferra a la aspiración de surgir y ponerse en ruta de fortaleza, que le permita en el 2027 participar con más fuerza y presencia, buscando llegar al 2030 con el vigor de antaño.

Es Rolando Zapata Bello el líder de un partido que poco a poco va recuperando la confianza de su estructura territorial y de su estructura humana, que a raíz del 2018, se fue a otros partidos políticos, buscando espacios, especialmente de índole laboral para llevar sustento a sus familias.

Es Rolando el político que está caminando las colonias, los fraccionamientos, las comisarías, los municipios, para hacer presencia. Y aunque no todo es “miel sobre hojuelas”, él saca los recursos políticos para re encontrarse con la militancia.

Su mensaje va encontrando eco en la militancia tricolor, que ve con esperanza la oportunidad de ver a su partido en la ruta del resurgimiento político.

Es Rolando, el priista que no se fue, el que encabeza el esfuerzo por devolverle a la institución más relevante de la historia política, su identidad y su orgullo.

Haciendo lo correcto, Rolando abandera el espíritu de un PRI vivo, emocionado y con vigor.

Este PRI no tardará en reponerse del 2018, y lo hará de la mano de la mejor carta política que tiene y que desde el senado, junto a un buen equipo político, podrá proyectar al tricolor rumbo al 2030, con perspectiva de éxito.