Sofía, 19 abr (EFE).- El ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, declaró hoy en Sofía, “consciente” de los sentimientos prorrusos de una parte de la sociedad búlgara, que la Rusia actual es una que “destruye, asesina, tortura y viola”, por lo que no merece ni compasión ni comprensión.
“Soy consciente del papel de Rusia en la historia de Bulgaria, como también en la historia de Ucrania”, dijo Kuleba en rueda de prensa tras reunirse con su homóloga búlgara, Teodora Genchovska.
“Históricamente Rusia hizo algunas cosas (positivas) que siguen viviendo en los sentimientos de los pueblos de estos dos países”, pero la de hoy es una Rusia “diferente”, añadió.
“Destruye, asesina, tortura y viola. Esta Rusia no es la que merece compasión y comprensión. Quiero que todos entiendan esto”, insistió el jefe de la diplomacia ucraniana.
Bulgaria es uno de los únicos dos miembros de la OTAN -junto a Hungría- que se niega a enviar ayuda militar a Ucrania.
Ambos Gobiernos argumentan que la entrega de armas a Kiev puede convertirlos en parte del conflicto.
En Bulgaria el asunto es particularmente sensible debido la histórica simpatía hacia Moscú de una población educada durante generaciones en un sentimiento de agradecimiento hacia la contribución de Rusia a su independencia.
El apoyo ruso fue clave para la liberación de Bulgaria del dominio de cinco siglos del Imperio Otomano en la guerra ruso-turca (1877/1878).
En la coalición actualmente en el poder, es sobre todo el Partido Socialista, heredero del antiguo Partido Comunista y cercano a Rusia, la principal fuerza que rechaza enviar armas a Ucrania.
Estas reticencias fueron confirmadas indirectamente hoy por Genchovska al resaltar que su país ya hace lo que puede por ayudar a Ucrania.
“Como un país pequeño y conforme nuestras posibilidades tratamos de ayudar al máximo al pueblo ucraniano”, afirmó la ministra.
Recordó la ayuda humanitaria, que desde el inicio de la invasión rusa en Ucrania el 24 de febrero asciende a 1,5 millones de euros, además otros 185.000 euros canalizados a través de varias oenegés.
Además, a Bulgaria, el país más pobre de la Unión Europea (UE) han llegado hasta ahora más de 91.000, indicó.
Kuleba reconoció y agradeció ese apoyo, al tiempo que advirtió de que lo que hay ahora en juego traspasa las fronteras de su país.
“Lo que pasa hoy en Ucrania es esencial para el futuro de toda la región y la seguridad de Ucrania es seguridad para todos los países del Mar Negro”, destacó Kuleba.
El ministro llegó anoche a Bulgaria en una visita que no había sido anunciada previamente.
Según confirmaron a Efe hoy fuentes del Gobierno búlgaro, en Sofía Kuleba tiene previsto entrevistarse hoy con el primer ministro del país balcánico, Kiril Petkov, y mañana con el presidente del país, Rumen Radev, considerado simpatizante del Kremlin.
