al aclarar que se plantea la participación del sector privado en el servicio de distribución pero bajo la supervisión y control del gobierno.
Al participar en la Primera Reunión Nacional de Infraestructura Hidráulica, organizado por la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), dijo que se requiere el doble de la inversión actual en este sector, es decir de 25 mil millones de pesos pasar a 50 mil millones de pesos.
Ante los industriales de la construcción indicó que se necesitan esquemas de financiamiento “más agresivos, inteligentes y propositivos, sin caer en tabúes y mitos de que si participa la iniciativa privada en el servicio se esté privatizando el agua. Eso es falso”.
Calificó de crítica la situación del agua en el país, con “rezagos de años luz” en algunos servicios a nivel municipal, con un incremento en la demanda, falta de eficiencia en el uso agrícola, industrial y residencial, con sobreexplotación de acuíferos y con atraso en la construcción de plantas para tratar aguas residuales.
Luege Tamargo precisó que hay estados y municipios que no están de acuerdo con la participación de empresas privadas, por lo que exhortó a analizar las ventajas antes de oponerse. “Algunos partidizan o ideologizan el tema, lo cual es un error, la iniciativa privada no tiene colores ni partido. En crisis es donde más se debe invertir”.
Garantizó que la apertura a la iniciativa privada traerá beneficios mediante programas de prestación de servicios en el ámbito municipal, esquemas de bono de deuda y proyectos construir-operar-transferir.
En ellos, dijo, “el inversionista privado puede realizar la obra de infraestructura y luego operar una planta de tratamiento, una planta potabilizadora, un acueducto, un sistema de bombeo, y se le paga como contraprestación de servicio por metro cúbico abastecido”.
Agregó que en muchas partes del mundo, incluidos los países socialistas, se permite que empresas privadas operen los sistemas de agua y, en el caso de México, no se violaría la Constitución.
El agua, recordó, es un bien público, de la nación, establecido por la Constitución. “La participación de la iniciativa privada en organismos de agua es la única forma de lograr resultados y un equilibrio”.
Afirmó que hay “grandes inversionistas” interesados en participar en obras hidráulicas “y la Conagua está abierta”. Se trata, precisó, de licitaciones internacionales. “Hay interés de participar de empresas europeas, de Estados Unidos, de todo el mundo. Lo que se puede hacer es una asociación de empresas mexicanas con consorcios extranjeros”.
Asimismo, apuntó que se acaban de adjudicar dos grandes plantas de tratamiento en Guadalajara bajo un esquema de participación público-privada. “También van acueductos como el Acueducto II de Querétaro y el próximo año, saldrá la licitación del acueducto Falcón Matamoros”.
Por otra parte, recordó que el presupuesto sexenal de la Conagua es de 220 mil millones de pesos.
En cuanto al Sistema Cutzamala, detalló que se autorizaron 900 millones de pesos para 2009, “llevamos ejecutados 60 por ciento y tenemos autorizados 800 millones para el próximo año”.
De esa forma, aseguró, “se está quintuplicando” la inversión para el Distrito Federal, al considerar los casi mil millones de pesos en inversión para el Túnel Emisor Oriente y la planta tratadora de agua de Atotonilco, a parte de los programas federalizados para el Estado de México y la capital del país
