Inicio Análisis político Alejandro López Munguía Una historia que aterroriza a los yucatecos.

Una historia que aterroriza a los yucatecos.

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Una historia que aterroriza a los yucatecos.

I.- Ya es urgente que el Gobernador del Estado, Mauricio Vila Dosal, detenga los abusos de varios miembros de las policías, estatales y municipales en la entidad. En aras de “proteger” a los ciudadanos, policías han sido señalados como responsables de diversos abusos de autoridad, violencia y violación a los Derechos Humanos en contra de muchos, pero muchos habitantes del estado.

II.- El terrible asesinato de un joven de origen veracruzano a manos de policías del estado, prende las alarmas en el estado. La forma tan cruel como fue ultimado nos narra una historia de terror que los yucatecos nunca nos imaginamos. Y las historias son incontables, van desde feminicidios, gopizas a jóvenes, hasta persecuciones contra periodistas y sus familias.

III.- En todo el estado hay historias de policías violando los Derechos Humanos de los ciudadanos. Y no es de ahora, el tema ya viene siendo costumbre desde hace ya varios años. El problema ha venido creciendo sin que nadie haga nada en concreto.

IV.- Quién olvida el video donde se ve a un policía estatal y a varios de la policía de Tekax golpeando en el suelo a un ciudadano. El hombre joven gritaba clamando clemencia y más le pegaban. La burla era evidente. ¿Hubo castigo contra los responsables?, dijeron que sí, pero todo lo manejaron de forma que el tema se olvidara. De hecho, desde palacio de gobierno (en los tiempos de Rolando Zapata) se tiraba línea editorial para que no se publicara nada sobre la violación a los Derechos Humanos de las policías.

V.- “Levantones”, golpizas, allanamientos de moradas, detenciones violentas, mordidas, constituyen los abusos en los que muchos policías han incurrido en contra de ciudadanos indefensos. Yucatán no se merece este escenario de violencia y de abuso.

VI.- ¡Qué bueno que el Gobernador Mauricio Vila ha dado a conocer la detención de los responsables del crimen contra el joven veracruzano, “levantado”, violado y asesinado por estos policías municipales. ¡Qué bueno!, porque ya estábamos muy preocupados por la forma en la que nadie reaccionaba.

VII.- Todos los yucatecos presumimos de vivir en un estado de paz y tranquilidad, por la seguridad que existe. Sin embargo, cada día crece la desconfianza de los ciudadanos en las policías de Yucatán. Las historias de agravios y de violencia, tanto verbal como física, van en crecimiento.

VIII.- No es justo para los ciudadanos, ni para el Gobernador Vila Dosal, que la policía le falle a los yucatecos. Y nadie olvida que fueron ellos los que agredieron al pueblo al arrojarle tres granadas de gases lacrimógenos para disolver su marcha, donde se manifestaban por la situación social y política del estado. ¿Alguien sabe si se castigó al responsable de dar la orden de la agresión, o al responsable de haber lanzado las granadas?.

IX.- El Gobernador Mauricio Vila no puede permitir que actos de policías “torpedeen” su camino hacia la candidatura presidencial. No puede permitirse ese grave error. Por ello, debe tomar cartas en el asunto. Seguramente contará con el apoyo de su Secretario de Seguridad Pública, el experimentado Comandante Luis Felipe Saidén, quien seguramente apoyará en todo al mandatario.

X.- Mauricio Vila enfrenta el gran reto de demostrar que la seguridad en Yucatán no es un mito, sino una realidad. Que los abusos de autoridad de diversos policías, comandantes y oficiales, se van a terminar. Porque no puede haber un Yucatán Seguro con una policía que aterroriza a los ciudadanos. Debe haber castigo legal para los responsables del asesinato de este joven veracruzano y deben ser expulsados todos los miembros de la policías corruptos y violadores de los Derechos Humanos.

La neta del planeta.- Mauricio Vila nunca se imaginó que iba a enfrentar este terrible problema por los abusos de policías. A mí también me parece injusto para él y para todos los yucatecos. Porque él no amanece pensando en usar a la policía para aterrorizar a la población. Son muchas las familias yucatecas que han sido víctimas de la violencia, la grosería, la petulancia, la soberbia y los abusos de autoridad de policías en todo el interior del estado. Y a todo esto, ¿dónde está la Comisión Estatal de los Derechos Humanos para defender a los ciudadanos?. Está visto que es una basura.