Un partido emocionante, digno de una final, demasiado dinámico, apasionado, de ida y vuelta sin descanso, y no apto para cardíacos, así fue la final del fútbol mexicano en la que Tigres y “el tuca” por fin consiguieron el título.
Los pumas tenían que salir a jugarse el todo por el todo si querían conseguir el campeonato. No tenían de otra y así lo hicieron, explotaron sus mejores cualidades y se mostraron como el equipo que jugó el torneo regular. Ordenados, dinámicos, jugando en diagonales para entrar por el centro y así abrir y desacomodar a una defensa regia muy bien escalonada.
Tigres empezó dominando el juego, parecía un deja vu del partido de ida, hasta el minuto 41′ cuando Lalo Herrera anotó. De ahí empezó a mostrarse el juego que ya se mencionó, de los de la UNAM.
Con el estadio lleno y todo el apoyo universitario, se veían ya campeones, el tuca se desesperó y sacó a 2 de sus mejores hombres, Jurgen Damm y Rafael Sobis. En ese momento reflejó el mal manejo de finales del brasileño. Permitió que Vázquez tomará la media cancha, se adueñará de la pelota, creara jugadas de gol y más importante, que las terminara.
3-0 y el partido se fue a tiempos extras. Para mala suerte, los de casa ya jugaban con 10 hombres. Lalo Herrera, el hombre referente del ataque universitario, estaba siendo expulsado. Entonces ahí cayó en estrés, desesperación y angustia Memo.
Gignac la figura del torneo, demostró porque lo es. Anotó y puso el marcador 4-3, la maldición de Vázquez rondaba a unos pumas preocupados. Hasta que llegó el empate, 4-4 y a penales.
La cara de Memo reflejaba angustia. Recordemos una vez más la final en la que le empatan de ultimo minuto en tiempos extras y le ganan en penales(4-2), nada más que esa vez era el América y no dirigía a Pumas, sino a Cruz Azul.
Pero es igual, Técnico que no gana campeonatos ni dirigiendo el Barcelona ganaría. Y ¿que paso?, Memo perdió otra final en penales y por marcador de 4-2..
Se auguraba la derrota de Memo, pero no porque el tuca sea mejor, ni por la ventaja que tigres traía, se auguraba la derrota de Memo porque no sabe jugar finales.
Ferreti, otro técnico que no sabe jugar finales, pero que esta vez ganó, entregó un partido que tenía a modo para ganar. Obsequio el medio campo cuando era el momento de tomarlo, aprovechar las bandas con 2 jugadores de la velocidad, habilidad y destreza como Aquino y Damm, y aprovechar a 2 delanteros efectivos como Gignac y Sobis, puso detrás del medio campo a Damm y Aquino, para evitar las subidas de los volantes de pumas, y dejar solo en punta a Gignac para un contraataque, el mismo cuadro pero diferente planteamiento… Que suerte la tuya “Tuca” que suerte la tuya.
